
El regreso a la escuela se diluye por el recrudecimiento de la pandemia, en sí mismo se perfila como una pregunta, no sólo por lo atípico de la situación: complementación entre clase virtual y clase presencial, y otras derivaciones en una realidad inesperada. El reencuentro con compañeros, con la amistad que se añora en una ausencia que incluyó el Día del Amigo, con la exigencia propia de la escuela, se prolonga en la incertidumbre; significa un escenario con dudas, cuestionamientos, también una oportunidad para descubrir cosas que eran cotidianas, pero puede ser que, en esa cotidianidad, aspectos importantes de ellas no se habían notado bien. La amistad estuvo separada por una cuarentena, manteniendo presencia virtual, puede ser una situación propicia para pensarla como realidad, qué significa ser amigos.
Ese aspecto de la vida, recorre diversas formas de vínculos, puede darse entre compañeros de trabajo, de estudios, en múltiples situaciones y formas. Está en la dimensión religiosa, Jesús llama amigos a sus discípulos que participan de lo que el Padre dijo.
"Ya no os llamo siervos, pues el siervo no sabe qué hace su señor; yo os he llamado amigos porque os he dado a conocer todas las cosas que he oído a mi Padre". Jn 15, 15.
Están unidos a la misión de Jesús, participan de ella; hay sentido de pertenencia, al seguir a Jesús pertenecen a la misión que Él desarrolló en el mundo; eso los hace colaborar con Jesús en su misión, también los hace amigos. En la amistad hay sentido de pertenencia, yo con una amistad compartimos algo común. Pero la amistad une en el bien, eso común debe tener el carácter de bien. Lo advirtió Aristóteles al explicar la forma más alta de amistad, como la unión de dos personas que buscan la excelencia.
Una situación objetiva puede ser ocasión favorable a la amistad, como compartir la escuela o el curso; pero se necesita una situación afectiva, que aparezca el sentido de pertenencia; entonces puede mantenerse trasladada a la distancia virtual.
Además, el significado de virtualidad se ha distendido abarcando aspectos de la realidad, que pueden ser descubiertos con la ayuda de la imaginación.
Qué significa la amistad virtual frente a la amistad real. La circunstancia impuesta por la emergencia sanitaria ha ayudado a ver esa diferencia. Una amistad que se mantuvo en la virtualidad, puede verse fortalecida en el reencuentro. Pero hay cosas que considerar, la virtualidad se ha desarrollado haciendo que a veces se dé junto a la realidad; incluso se dan casos de confusión, viviendo en un estado de virtualidad, tema que preocupa en la juventud y no es ajeno a la escuela. también preocupa la adicción a la tecnología.
Van a aparecer situaciones nuevas, la oposición entre real y virtual puede disminuir, considerando en la virtualidad la posibilidad de ayudar a la educación real. Eso entendiendo por real compartir un espacio, y por virtual compartir una situación, no con la inmediatez del mismo espacio, sino en la mediación de la tecnología, en una comunicación a distancia. En relación con la amistad, también puede haber incertidumbre. La dispersión en la superficialidad, la sobre-estimulación, en nuestro tiempo, puede hacer en algunos casos, que no se considere lo suficiente la amistad; la virtualidad usada en educación puede ser ocasión para pensar su valor. Hoy, el significado de amistad se ha distendido, puede abarcar vínculos episódicos en chat; si no fue una distracción pasajera y se mantuvo el vínculo, puede seguir en la vuelta a la presencia escolar.
Dr. Manuel Castillo
Profesor Titular de Antropología Filosófica de la FFHyA. Profesor titular de Filosofía de la Educación y de Lógica.
