Anfitrión. El gobernador Uñac le agradeció a Alberto Fernández que comenzara su recorrida por San Juan. Hubo elogios mutuos.

 

En el inicio de su recorrida por el país, el precandidato a presidente por el Frente de Todos, Alberto Fernández, hizo punta ayer en San Juan para ir afianzando el apoyo territorial de cara a las PASO de agosto y las generales de octubre. El exjefe de Gabinete kirchnerista colmó de elogios a Sergio Uñac y aseguró que les abrirá lugares a los gobernadores en una eventual gestión al frente de la Nación. Además, se mostró a favor de respaldar y fomentar la actividad minera y de impulsar el Túnel de Agua Negra en caso de llegar al Ejecutivo. 

Fernández tuvo una apretada agenda, en la que se reunió y arengó a los militantes (ver nota vinculada), brindó una conferencia de prensa, participó del desfile en Chimbas por el Día de la Bandera y almorzó con Uñac. En un hueco, tuvo un mano a mano con DIARIO DE CUYO (ver entrevista). El presidenciable resaltó la "extraordinaria elección" que hizo el Gobernador en la provincia y que "nos marcó el camino a todos de lo bueno que es estar unidos". En ese marco, señaló que "cuando veo a Sergio, veo al futuro del peronismo y de la Argentina" y que su administración ha demostrado "otro camino" diferente al que lleva adelante Mauricio Macri. 

De cara a consolidar la estructura territorial, enterrar críticas y mostrar una amplitud y renovación del kirchnerismo en una posible gestión, Fernández envió señales a los mandatarios. Así, sostuvo que "estoy decidido a trabajar codo a codo y a tener un vínculo personal con los gobernadores. Son piedras basales de la Argentina". Ante la consulta si tendrán lugares en su hipotético gabinete, respondió que "¿cómo no voy a abrirles lugares? Por supuesto que sí". 

Entre sus propuestas, dijo que apoyará a la actividad minera para que tenga un desarrollo superior. "Nunca entendí por qué del otro lado de la cordillera los chilenos tienen tanta minería y parece que nosotros no la tuviéramos. No tenemos más minería por desidia nuestra. Tenemos que trabajar muy bien con eso y cuidar a los que habitan esas zonas". Incluso, destacó que "siempre digo que me apena mucho que, por ejemplo, el silicio se saque y vuelva en forma de pantalla solar. Quisiera que pudiéramos industrializar eso aquí. Tenemos mucho que hablar con Sergio". Y sobre el Túnel de Agua Negra manifestó que es una obra prioritaria que "hay que hacer" para que "San Juan pueda salir hacia el Pacífico, al igual que las provincias cordilleranas para no condenarlas al centralismo porteño". 

Una alternativa que vienen solicitando las provincias tiene que ver con subsidios a los fletes para el traslado de cargas hacia el puerto de Buenos Aires, ante lo que Fernández señaló que "habrá que ver cómo trabajarlo y hacerlo". En el punto en el que tampoco tuvo una definición terminante fue en el de la eliminación de las retenciones a las exportaciones. "Hay que trabajarlo con cuidado y atención, porque la verdad es que Macri desfinanció al Estado nacional. Cuando el Estado les exige a los sectores más de lo que puede, también se vuelve contra la economía", indicó.

En conferencia de prensa y ante la consulta si una eventual derrota significaría el fin del kirchnerismo, Fernández dijo que no ha pensado en una caída y que "para que Argentina gane hay que cambiar este presente". Además, aseguró que "si la Justicia existe, nadie va a condenar Cristina" y que "vengo con cero vocación de venganza sobre los jueces".

 

A la caza de los votos de los indecisos y desencantados

 

Arenga. Fernández les pidió a los militantes que lo ayuden. Estuvo con Uñac, el exdiputado Fernando Navarro y el exsenador Ruperto Godoy, entre otros.

 

Acompañado del gobernador Uñac y de referentes kirchneristas, Alberto Fernández se hizo de unos minutos para hablarle a los militantes. En su discurso, les pidió que lo ayuden y salgan a la calle a cazar votos para una elección que se vislumbra palmo a palmo contra la fórmula Macri-Pichetto. Por un lado, apuntó a los indecisos. "Salgamos a convencer a todos los que no están convencidos", destacó. Por otro, a los desencantados. "Abracemos a los que votaron a Macri y fueron defraudados. Son ciudadanos que confiaron y fueron estafados. Vayan tranquilos que con Cristina y conmigo no vamos a estafar a nadie", remarcó.

El precandidato a presidente del Frente de Todos se mostró abierto a los planteos, a tono con el perfil conciliador que quiere demostrar. "Les pido que nos digan y marquen cuando nos equivoquemos", les dijo a los seguidores. Resaltó el escenario de pobreza y desempleo a nivel nacional y remató que con Néstor Kirchner en 2003 ya estuvieron "en el laberinto en el que nos metieron estos mismos personajes y ya los recorrimos y descubrimos cómo se sale".