El presidente Alberto Fernández reconoció este martes la fuerte interna que atraviesa el Frente de Todos, profundizada tras el rechazo de un sector del kirchnerismo al acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI).

"Cuando me propusieron estar a cargo sabía que iba a tener que tomar decisiones y esperaba que me acompañaran y no me acompañaron", cuestionó el Presidente.

En este sentido, agregó: "No todos pensamos igual. Lo que creo que no podemos hacer es darnos el lujo, por la causa que sea, narcisismos, egoísmo, política, de desunirnos".

"De mi parte no esperen un solo gesto que rompa la unidad. Yo no soy títere de nadie. Ha quedado demostrado que tengo diferencias, pero yo actúo con mis convicciones. Yo escucho a todos, pero el Presidente soy yo y el que tiene que tomar las decisiones soy yo", expresó.

Y añadió: "Yo valoro a Máximo y a Cristina, esto no va a en detrimento de nadie, pero no existe la presidencia colegiada. Yo escucho a todos, pero la decisión la tengo que tomar yo".

"Guerra contra la inflación"

El presidente también insistió con el concepto de "guerra contra la inflación" con otra polémica comparación: "Los ciudadanos argentinos son mi ejercito y enfrente están los especuladores", dijo el mandatario.

"Algunos especulan y suben precios por las dudas. Esta es una batalla que tenemos que dar entre todos. Y tenemos que denunciar al supermercadista del barrio que no entiende las cosas y pone los precios que pone", enfatizó Fernández en diálogo con radio El Destape.

En este sentido, enfatizó: "Tenemos que ir detrás de los especuladores".