En 1976 comenzó la construcción de la Catedral de San Juan. Tres años después, un 16 de diciembre quedaba formalmente inaugurada. Es que el antiguo templo debió ser demolido como consecuencia de los severos daños sufridos en el terremoto de 1944.
Las obras no sólo tardaron una eternidad en iniciarse, sino que además se detuvieron una y otra vez. Sin embargo, cuando las condiciones estuvieron dadas, los católicos pudieron disfrutar de ver nuevamente ‘su casa’ de pie.
La imagen de Cristo montada sobre la pared trasera de la Catedral es obra del escultor italiano Ángelo Bianchini. Fue tallada en piedra de laja.
Esa jornada histórica para la grey católica, tuvo como momento cumbre una misa en horas de la tarde oficiada por el obispo Pío Laghi. Cientos de sanjuaninos se acercaron llenos de emoción, para poder ver con sus propios ojos la magnífica obra.











