Estaba cansado. Era 2012 y no tenía la oportunidad de jugar. Deportivo Merlo tocó la puerta y lo quería de regreso, pero el profe Osorio, su entrenador en Atlético Nacional, le pidió que lo esperara. En el partido siguiente, Franco Armani se rompió los ligamentos cruzados. A partir de allí, la vida del arquero cambió completamente.
"Yo creo que ahí empezó todo. Si me hubiera ido a Merlo, no creo que mi vida deportiva hubiese sido mejor. Las cosas pasan por algo. Dios me puso esa lesión para decirme "no te vayas de Nacional, que vienen cosas muy buenas para vos", explicó Armani en una charla en El Gráfico hace más de un año.
El arquero nacido en Casilda hace 31 años comenzó a creer en Dios. No tenía ganas de ir a la recuperación en el club y después de la operación tenía miedo de tirarse al piso porque creía que no volvería a estar como antes. Empezó a ir a la iglesia y su vida cambio. Franco se recuperó correctamente y como le había vaticinado una canalizadora de ángeles en Medellín, su carrera iba a tomar una curva ascendente. En 2013 logró su primer título en Atlético Nacional y torneo a torneo comenzó a consolidarse como un referente del club.
Armani logró 13 títulos con la camiseta de Atlético Nacional y se convirtió en el más ganador en la historia del club colombiano. Además, estableció el récord histórico de imbatibilidad en el fútbol colombiano, con 1046 minutos sin recibir goles en todas las competencias.
Su gran nivel lo acercó al fútbol argentino. La Copa Libertadores 2016 fue clave para que Argentina lo viera con otros ojos. Ante Rosario Central se transformó en héroe de su equipo con una triple atajada inolvidable. Gallardo quería cubrir la salida de Marcelo Barovero y lo fue a buscar en 2017, pero el arquero rechazó el ofrecimiento. En enero de 2018 pensó que la mejor manera para tener una posibilidad en la Selección Argentina era si jugaba en el fútbol argentino y tras una despedida emocionante en Medellín, aceptó la oferta de River y se transformó en el nuevo arquero del "Millonario".
Fueron pocos partidos en River, pero Armani tuvo actuaciones tan destacadas que pasó de estar fuera de la consideración de Jorge Sampaoli a que la gente lo pida como titular. El arquero siguió siendo figura y el entrenador argentino lo confirmó en la lista de 23 jugadores que viajaban al Mundial de Rusia.
Será el destino, será una cuestión de fe, pero la lesión de Sergio Romero en la previa y el grave error de Wilfredo Caballero ante Croacia lo pusieron como el ‘1’ en la consideración de Sampaoli. Argentina ganó un partido clave ante Nigeria para clasificar a Octavos del Mundial. En su arco, estuvo un hombre apoyado en la fe de Dios y que hizo su debut absoluto en la selección: Franco Armani.
Fuente: Marca Claro Argentina