El juez federal Ariel Lijo envió a la Policía Federal con una orden de presentación a la empresa estatal Aysa (Agua y Saneamientos Argentinos), a la automotriz Renault Argentina y a la concesionaria de autos Lumiere para pedir y secuestrar documentación relacionada con la compra que realizó la compañía que comanda Malena Galmarini de 613 autos y 7 camiones eléctricos, por unos 25 millones de dólares.

Los procedimientos obedecen a una causa que investiga Lijo con intervención del fiscal Carlos Rívolo por supuestos sobreprecios en la adquisición de los vehículos tras una denuncia de los diputados Ricardo López Murphy y Marcela Campagnoli, y de Juan José Calandri, quien se desempeña como auditor general de la Ciudad de Buenos Aires.

Se trata de una denuncia de los representantes de Juntos por el Cambio contra Galmarini, quien oficia como virtual jefa de campaña de su marido, el candidato presidencial oficialista Sergio Massa. AySA dijo que no se trató de un procedimiento judicial, sino de un requerimiento de información.