Ginés González García se presentó este miércoles ante los diputados en momentos en que es fuertemente criticado por el principal espacio de la oposición, Juntos por el Cambio (JPC), pero justo un día después de la publicación de los resultados de la fase III en la prestigiosa revista The Lancet de la vacuna Sputnik V, que fue festejada como un golazo por el Gobierno nacional y el Frente de Todos (FDT).
Por videoconferencia, el ministro de Salud defendió su gestión ante la Cámara Baja, adonde fue invitado a exponer sobre la gestión de la pandemia y el plan de vacunación, y se quejó del rol de la oposición.
La eficacia de la vacuna rusa contra el Covid-19 venía siendo puesta en duda no sólo por la oposición argentina, sino por la comunidad científica internacional, justamente debido a la falta de publicación de los resultados de las pruebas con seres humanos.
A fines de diciembre pasado, la líder de la Coalición Cívica-ARI, Elisa Carrió, presentó una denuncia penal contra el presidente de la Nación, Alberto Fernández, a quien acusó de “envenenamiento de la población”, por la aplicación de la Sputnik V.
“En nuestro país y en el mundo hay muchos que suelen transformar la incertidumbre, que existe, en malas noticias. Y eso a veces complica y la verdad es que ninguna vacuna se aprueba por lo que sale en una revista; las vacunas se aprueban por lo que presentan como documentación sistematizada y tenemos el orgullo de tener una agencia como la Anmat, respetada en todo el mundo”, dijo González García al inicio de su exposición.
Aludió de esta manera a la decisión del Gobierno argentino de empezar a vacunar con la Sputnik V tras el aval de la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat), pero sin que se hubieran publicado aún, en el ámbito internacional, los resultados de fase III.
“Nosotros teníamos absoluta tranquilidad sobre la vacuna (Sputnik V); pero, por supuesto, la noticia de ayer (la publicación de resultados de fase III en The Lancet) sirve para que la gente se reafirme en creer en la vacuna”, dijo el ministro de Salud.
Vaticinio
Sobre el final de su participación, González García pronosticó que la pandemia cederá recién en el segundo semestre: “La vacuna recién, recién, para tener una inmunidad de rebaño uno puede decir… yo diría después de julio. Hasta ahí nosotros vamos a ir disminuyendo la transmisibilidad, pero sobre todo disminuyendo la mortalidad y los efectos graves”, dijo.
Agregó que en ese escenario “no hay una vacuna que tenga más porcentaje que la otra”, porque a su criterio “todas son muy buenas”.
González García brindó su exposición y escuchó y respondió preguntas de los diputados integrantes de la comisión de Salud, que preside el peronista tucumano Pablo Yedlin, por teleconferencia.
Estuvo acompañado por Manuel Limeres, presidente de la Anmat, organismo público encargado de analizar y autorizar o no las distintas vacunas contra el Covid-19; y la médica Mirta Roses, integrante de la Comisión Nacional de Inmunizaciones (Conain).
También estuvieron la secretaria de Acceso a la Salud, Carla Vizzotti, y el subsecretario de Gestión Administrativa, Mauricio Monsalvo.
62 millones de vacunas para el país
El funcionario nacional sostuvo que “las falsas noticias erosionan permanentemente la confianza pública, y sobre todos las verdades y las evidencias, y someten a cosas tan duras, como que te acusen de asesino o de que uno envenena a los argentinos, que por supuesto son descabelladas y generan quiebres en el ánimo colectivo”.
González García se declaró “muy pero muy conforme” con su gestión para que la Argentina haga frente a la pandemia, y dijo que se trata de “una política común con todas las provincias argentinas”.
“Todas las medidas se tomaron con bastante anticipación respecto del resto de los países del mundo”, dijo el ministro.
González García brindó algunas precisiones respecto de la llegada de otras vacunas, además de la Sputnik V, y de cómo avanzaría el plan de vacunación.
“El número que tenemos hoy es bastante claro: son 30 millones; con las 20 millones que ya están, más la adenda de la vacuna rusa, son 22,4 millones, de la de AstraZeneca, más una negociación que estamos haciendo por 1,2 millón también de esa vacuna. O sea que serían 23,4 millones, y los 9 millones de COVAX (fondo de la Organización Mundial de la Salud, OMS). La suma total es 62 millones. Si sacamos los 15 millones de argentinos que tienen menos de 18 años, casi tenemos cubierta la población argentina, y la verdad es que lo que nos pueda faltar estamos en dos o tres negociaciones”.
Respecto de la vacuna Moderna, afirmó que Alberto Fernández habló con el presidente de la empresa estadounidense, que le transmitió que “no tendrá disponibilidad [de vacunas para el país] hasta el segundo semestre”.
Sin embargo, señaló que con la llegada de las vacunas de Jansen (Estados Unidos), Sinopharm (China) y CanSino (China) “vamos a sobrepasar… vamos a tener prácticamente a todos los argentinos vacunados”.
También dijo que desde el inicio de la pandemia en el país se hicieron 6,2 millones de test del SARS-CoV-2.
Chicanas
El diputado más duro con González García fue el radical tucumano José Cano, quien, aunque reconoció que hubo coordinación entre las provincias y la Nación y destacó que el sistema de salud no colapsó, defendió a la oposición en su función de controlar, interrogar y cuestionar al Gobierno.
Destacó que JPC “le dio al Ministerio todas las herramientas que solicitó, en virtud de la necesidad de que la Argentina cuente con las vacunas para poder inmunizar en el menor tiempo a la mayor cantidad de población”.
“Nosotros no somos antivacunas; tampoco hemos generado falsas expectativas en la gente; ni hemos dicho que entre enero y febrero iba a haber entre 5 y 10 millones de personas vacunadas. Tampoco generamos expectativas diciendo que ya llegaban las vacunas, las Sputnik V, y que íbamos a vacunar a los adultos mayores, y después nos enteramos de que todavía la vacuna no estaba autorizada para ese grupo”, amplió Cano.
El radical resaltó que “el propio Presidente planteó algunas dudas respecto de si él se vacunaba o no”. “No son dos semanas o una semana: estamos ya prácticamente a mediados de febrero y todavía no se llegó a vacunar ni al 0,3% o 0,4% de la población argentina. Y recién estamos empezando a vacunar a los adultos mayores, a las personas que tienen enfermedades preexistentes”, criticó y le pidió al ministro que aclare los plazos.
González García le respondió con chicana: “Me encanta que el diputado Cano se preocupe tanto por las vacunas. Hubiera sido bueno que lo hiciera en su gobierno, que hubieran andado mejor las cosas, y no hubieran quedado 12 millones de vacunas en la Aduana y 4 millones en un depósito sin usar”.
Y completó: “Usted [Cano] dijo ‘mediados de febrero’. Hoy es 3 de febrero. No es ‘mediados de febrero’. No hay que saber mucho de epidemiología, sino de matemática. Pero, de todas maneras, quédese tranquilo que a mediados de febrero usted tendrá mejores noticias que las que tiene ahora”.