Los ánimos de los productores sanjuaninos de hortalizas no son los mejores…
Recorriendo una parte de Médano de Oro, en Rawson, estuvimos con algunos de ellos y los testimonios revelan la cruda situación que están viviendo. Pidieron no dar sus nombres, dado el difícil momento socio-económico actual y para evitar inconvenientes generales a futuro.
"No pongas mi nombre por favor -dijo el primero de ellos (que en ese momento había sufrido la rotura de una bomba de riego y se iba a un taller para ver de arreglarla)- hoy no ganamos para sustos. Imposible seguir así. El tema de contar con agua para poder regar las distintas chacras es imposible. Un pozo funcionando es una bendición, y cruzamos los dedos de que no se nos rompa, o que no nos roben, que es otro tema actual, la inseguridad".
"También -indicó el productor que posee finca sobre calle 9 casi Ruta Nacional 40- las piezas de los equipos de riego por goteo son un insumo muy importante. Por ejemplo, yo, para poder tener este cuadro de ajo, tuve que comprar 5 rollos de cinta de 200 micrones, de goteros cada 30 centímetros de separación, y de un caudal de 1 litro por hora y desembolsé casi $55.000 por cada rollo".
Ni hablar de los valores de las facturas de energía. En una finca donde en la temporada anterior pagaban $52.000 por la luz usada para bombear, actualmente están pagando $140.000. Nos mostraron las boletas, que recién habían cancelado. "De ser así, vamos a tener que empezar a vender movilidades para poder continuar, esto no da para más, dijeron dos hermanos. No tienen valor las acelgas, las espinacas y las verduras de invierno en general".

"Pienso que las chacras se están viniendo abajo porque no se puede sostener económicamente un lote de chacra", dijo otro productor vecino, sobre calle 10. "Ya sea ajo, cebolla, o tomate, no tienen precio. Con agua de turno es muy riesgoso. Yo también hago verduras de invierno, porque hay que tener todo el año, si no, no se puede vivir".
"La calidad se va a venir abajo", informó un experimentado productor de calle 11 a <BF><IC>Suplemento Verde<XB><XC>, "porque no se puede aplicar todos los fertilizantes, ni herbicidas o insecticidas que necesitamos, por los precios. Está todo dolarizado, pero lo peor es el dólar blue: está cerca de $500, el oficial a menos de la mitad, y nosotros las verduras las vendemos en pesos. Nunca nos va a dar la ecuación. El ajo no tuvo buen precio, la bolsa de cebolla no repunta hace mucho tiempo y el tomate para fábrica no ha dado buenos rendimientos por las heladas, algunos granizos y la ola de calor terrible que azotó este verano".
"El sector está desactualizado en precios", mencionó un joven e inquieto agricultor de calle 13, "el plantín del vivero es en dólares, la semilla también, los venenos y abonos igual, y nosotros seguimos cobrando miserias en pesos, una moneda que está fuera de contexto, no tiene valor en la actualidad".
"Otra realidad -resumió- es que no hay más cuotas para comprar en las casas de agroquímicos y se debe hacer al contado todo, es imposible renovar el stock de lo utilizado y así los cultivos no van a ser los mejores".
Quizás un resumen de la situación lo dio una joven chacarera que dijo "si bien nos gusta andar de alpargatas, no podemos trabajar por el pasto y las herraduras. La gente del campo entierra mucha plata todas las temporadas, espera, por lo menos, recuperarla".
