En una nota con este diario del martes de la semana pasada, el empresario José Cano, quien había sido elegido presidente de la Federación Argentina de Transporte Automotor de Pasajeros (FATAP), se presentó como "propietario" de una tradicional empresa de colectivos de la provincia, la Mayo. Ahora, los herederos de un socio fundador de la firma, Simón Peñafort, dijeron que en realidad se trata de una sociedad integrada por empresas y los descendientes de la familia Peñafort y que Cano ni siquiera figura como integrante de las compañías que forman parte de la transportista de pasajeros.
En el medio incluso hay una demanda que interpusieron los descendientes de Peñafort por los manejos en la Mayo, que dieron lugar a la intervención de una veedora judicial designada por la Justicia para supervisar el funcionamiento de la empresa.
"Es importante que San Juan tenga un representante a nivel nacional en la FATAP, pero hay que aclarar que la empresa Mayo es una sociedad constituida por un grupo de empresas y personas", dijo Mauro Iranzo Peñafort. El contador, junto a su hermano Sergio Iranzo y Antonia Peñafort actúan dentro de la firma en representación de los herederos del socio fundador Peñafort. Y son poseedores del 36,8% del paquete accionario de la Mayo. Los otros integrantes de la sociedad son la empresa Semisa, que preside Pedro Ponte, con el 20%, y Transportadora Cuyana SRL, con el 43,2%.
Lo que está en juego es el manejo de una de las tradicionales empresas de colectivos de la provincia, la Mayo que, según Cano, tiene 144 unidades y que va a renovar 60 unidades antes de fin de año.
Según Iranzo Peñafort, Cano "no sería integrante de ninguna de estas sociedades y tampoco acredita actuar como gerente, un puesto que ocupa Roberto Ariel Correa". El representante dijo que esto consta en las actas de la empresa.
Según señaló, Cano llegó a la empresa en el 2004, en representación de Transportadora Cuyana SRL, donde figuraba como gerente, en tanto que los propietarios eran su esposa y la mujer de su exsocio, Oscar Joao.
"En el 2016, los dos socios, Cano y Joao, dicen vender su parte de la empresa a un tercero, que es Semisa, pero sólo cediendo el 20% de las cuotas que les pertenecían". dijo el contador. Así se llegó a la constitución societaria actual de la Mayo.
Sobre el porqué de las expresiones de Cano, Iranzo Peñafort sostuvo que "desconocemos la intención de la maniobra, pero presumimos que son en detrimento de los socios minoritarios".
En la entrevista con este medio, Cano se había quejado porque dijo que el Gobierno nacional "discrimina" a las provincias del interior por el reparto de los subsidios al transporte. Pero que en una charla que había tenido con el presidente electo, Alberto Fernández, se había comprometido a revisar la situación y a hacer más equitativa la distribución.
Cano había expresado que era propietario de la Mayo desde 2004, pero que antes había estado dedicado a la actividad de transporte de pasajeros en Buenos Aires. Y que había llegado a San Juan afectado por problemas del corazón. En un principio no había estado en contacto con la actividad, sino que estuvo encargado de administrar dos fincas que había comprado en la provincia. Y que luego le habían ofrecido adquirir la Mayo, cosa que finalmente hizo, donde vino trabajando hasta ahora.
La FATAP
La Federación Argentina de Transporte Automotor de Pasajeros (FATAP), que preside José Cano, agrupa a las empresas del país que trasladan pasajeros en zonas urbanas. Se calcula que hay unos 19.000 colectivos en circulación en las ciudades.
Negocian el pasaje
Las empresas de colectivos de la provincia, nucleadas en la Asociación del Transporte Automotor de Pasajeros, que preside Ricardo Salvá, están en los aprontes de una nueva negociación por el valor del pasaje con la SUBE, que cambiaría en enero.