La decisión es oficial, porque la publicó el Ministerio de Trabajo de la Nación en el Boletín Oficial. Se trata de una nueva posibilidad para los kiosqueros de mejorar sus ingresos porque podrán entregar correspondencia, productos adquiridos por internet, tarjetas de débito y crédito, DNI y pasaportes. La novedad cayó bien en el sector, donde hay mucha expectativa ante la fuerte caída de las ventas por la desaparición de publicaciones en papel y su reemplazo por los medios digitales.
Todavía no hay fecha de la entrada en vigencia de la nueva modalidad de negocio porque debe ser reglamentada por la cartera laboral nacional, que será la encargada de manejar el sistema. Primero, las asociaciones gremiales, como en el caso del Sindicato de Vendedores de Diarios de San Juan, deberá firmar un acuerdo con las empresas de logística que prestan el servicio, como Correo Argentino y Andreani. Y se fijarán los porcentaje de ganancia que recibirán los canillitas por el servicio. Cada propietario de un kiosco que quiera participar en la nueva modalidad gestionará una credencial ante el Ministerio de Trabajo, que lo autorizará a distribuir los paquetes y la correspondencia.
En la práctica, los puestos de diarios y revistas funcionarán como puntos de entrega de los artículos. Así, alguien que está esperando por ejemplo una compra efectuada por internet, será notificado de que la puede retirar de un determinado kiosco en el momento que lo requiera.
Rolando Flores, secretario adjunto del sindicato local, dijo que "es una buena alternativa para mejorar las ventas" y que ya lo están conversando con los kiosqueros para ponerlo en marcha apenas puedan.
En un relevamiento que hizo DIARIO DE CUYO entre canillitas con puestos en el microcentro, a 6 de los consultados les pareció bien la iniciativa como una forma de mejorar los ingresos. Sólo uno de ellos dijo que no lo pensaba implementar. Uno de los que se mostró entusiasmado fue Adolfo Quiroga, con un kiosco en avenida Córdoba y Mendoza. "Es una posibilidad de un nuevo ingreso", sostuvo. Y con él coincidió Lucas Sánchez, tercera generación de canillitas, con parada en la esquina de Rivadavia y Mendoza. "Es una opción interesante", sostuvo.
Hasta ahora, los vendedores de diarios y revistas estaban autorizados, por ejemplo, a vender las tarjetas del Eco para el estacionamiento ordenado, la SUBE para el servicio de transporte de pasajeros, la carga de los celulares y de la televisión digital. Incluso algunos le han ido sumando al rubro, con el paso de los años y la caída de las ventas, servicios de fotocopias o venta de café. Pero, así y todo, les está costando mantenerse porque algunos deben pagar alquiler y el sueldo a algún encargado cuando al kiosco no lo pueden atender los integrantes de la familia.
Pablo Pedraza, con parada en la esquina de General Acha y Rivadavia, dijo que "me parece una buena idea porque suma para el negocio". Ariel Pintor, que trabaja en un kiosco en la esquina de la plaza 25 de Mayo, de Mendoza y Mitre, sostuvo que "es una ayuda más".
Roberto Molina, con un local en Mendoza y Mitre, también se manifestó de acuerdo con la iniciativa, aunque se mostró interesado en conocer más detalles de su funcionamiento.
Argumento oficial
La decisión del Gobierno nacional de autorizar que los kiosqueros puedan sumar nuevos servicios fue explicada con el argumento de que "a través de la regularización registral de los vendedores de diarios, revistas y afines, se han observado las problemáticas que afrontan en su práctica laboral concreta".
"El ingreso de los vendedores y distribuidores se viene erosionando por el deterioro que viene sufriendo la venta de diarios y revistas, principalmente por el avance de la tecnología y la lectura de diarios y revistas en formato digital", señala el texto.
En consecuencia, "ante esta situación se torna necesario autorizar a los vendedores y distribuidores a que incluyan otras prestaciones".