La decoración de interiores con verdes cada vez cobra más terreno. Sin duda son opciones ideales para personas que viven en departamentos o casas sin suficiente espacio para disponer de un patio o jardín, pero necesitan ese contacto cotidiano con la naturaleza. Esta temporada la tendencia son los hidroterrarios, con múltiples diseños.
La ventaja de los hidroterrarios es que llenan de frescura y delicadeza cada rincón del hogar, además de no requerir mucho cuidado, por lo que son ideales para aquellas personas que aman la naturaleza, pero no disponen de tiempo para cuidar plantas o simplemente tienen mala suerte.
¿Cómo armar un hidroterrario?
Si tienes en mente comenzar a cultivar en agua, es importante que elijas aquellas plantas que tienen la capacidad de enraizar en agua. Algunas sugerencias son potus, lazo de amor, lirios de la paz o monstera. Aun así, si tienes duda, puedes consultar en diversos portales sobre jardinería.
Cuando tengas seleccionada la planta colócala en un recipiente de vidrio. Procura que el mismo cuente con agua que estuvo reposando previamente 12 horas.
La ubicación es importante, puesto que no le debe dar el sol de manera directa ya que el vidrio puede hacer de efecto lupa y quemar la planta con los rayos solares, pero si debe ser un rincón bien iluminado para favorecer el desarrollo de la planta.
El truco para que el hidroterrario prospere en agua es cambiar el contenido del recipiente una vez a la semana. Transcurrido más de un mes se puede agregar sales de hidroponía, abono de lombriz o compost, para ayudar a la nutrición de la planta.
Si pasado un tiempo la planta comienza a enraizar, tienes dos opciones: pasarla a una maceta con tierra, para lo cual deberás ir agregando tierra de a poco para que la planta se vaya acostumbrando; o, cortar un poco las raíces si deseas que siga en agua, lo que deberás hacer una tijera que esté bien desinfectada.