Un exportador clave. La Argentina es el mayor exportador de harina y aceite de soja del mundo y el tercero de porotos de soja.

 

El Gobierno nacional acordó con la República Popular de China la apertura de ese mercado para la harina de soja argentina, principal producto de exportación del país, después de 20 años de negociaciones entre ambos países, confirmaron ayer fuentes oficiales.

El anuncio se formalizará hoy al mediodía en el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca, informó ayer la cartera agropecuaria en un comunicado. "¡Histórico!. Harina de soja a China", festejó el ministro de Agricultura, Luis Miguel Etchevehere, en su cuenta en la red social Twitter al conocerse la noticia. En su mensaje, Etchevehere recordó que se trata del producto "que más exporta la Argentina y China es el mayor consumidor mundial de proteína vegetal para alimentar animales. Cuenta con más de 500 millones de cabezas entre porcinas y bovinas".

A través de su cuenta de Twitter, el presidente Mauricio Macri dijo: "Después de 20 años de negociaciones llegamos a un acuerdo. China es el mayor consumidor del mundo de proteína vegetal para alimentación de ganado y ahora vamos a venderles un producto con mayor valor agregado".

En otro mensaje, Macri agregó: "Es una noticia clave para el sector agrícola. Nuestro país es el mayor exportador de harina de soja y ahora se abre uno de los mercados más grandes del mundo. Esto significa más mano de obra, más trabajo en la agroindustria y más oportunidades para los argentinos".

La Argentina es el mayor exportador de harina y aceite de soja del mundo y el tercero de porotos de soja. Este año se estima exportar en total 26 millones de toneladas de harina de soja, 6,5 millones de aceite de soja y 8,5 millones de toneladas de porotos de soja.

La cadena de la soja emplea en Argentina a unas 345.000 personas. Vietnam es un comprador clave.

China es el mayor comprador de los granos de soja sin procesar del país sudamericano. Sin embargo, hasta el momento el gigante asiático -que no es un jugador relevante en el comercio global del derivado de la oleaginosa- no autorizaba el ingreso de embarques del derivado de la oleaginosa de Argentina.

El presidente de la Cámara de Industria Aceitera de Argentina (CIARA), Gustavo Idígoras, dijo que el anuncio es un hecho histórico para el sector, aunque señaló que el comienzo del flujo de exportaciones hacia China no sería inmediato.

"A partir de este importante paso dado, quedan pendientes dos etapas más: la habilitación de las plantas agroindustriales, que podría anunciarse en octubre próximo, y el registro de producto, que va a demorar varios meses más, por lo que no es de esperar embarques inmediatos por el momento", explicó.

La cadena de la soja emplea en Argentina a unas 345.000 personas, lo que equivale al 16 por ciento de la mano de obra del sector agroindustrial nacional.

En la actualidad, el 60 por ciento de las ventas de harina de soja van a Asia, con Vietnam como principal comprador. Menos de un 40 por ciento va a Europa. También hay compradores en el norte de África.

China nunca importó harina de soja -compra el grano para procesarlo- y la Argentina será el primer país en venderle. En la industria creen que podrían exportar 5 millones de toneladas por unos 1.600 millones de dólares.

"Esta apertura es gracias al liderazgo del presidente Mauricio Macri y la relación de confianza con su par Xi Jinping. Argentina se reinsertó de forma inteligente en el mundo, y volvimos a ser un referente confiable en la producción de alimentos", destacó el ministro de Agricultura.