Amigos de la Esquina Colorada en tiempos pretéritos, al pie de las Sierras Azules, celebrando el cumpleaños del presidente de Del Bono, Lucho Salcedo Garay.

 

El 29 de octubre pasado, cumplió años Luis, el "Lucho", Salcedo Garay. Le está recién doblando el codo a los 60, es decir, es un pibe. No pudimos reunirnos para festejar su cumpleaños, por culpa de la pandemia, pero desde aquí, desde este humilde rinconcito, donde rescatamos nuestras pequeñas historias barriales, queremos mandarle un fuerte saludo y un interminable abrazo. Amigo sincero, cabal, de mano abierta. Presidente de nuestro club, Del Bono, desde los albores de este siglo XXI. El Lucho, hecho de noble madera, no debe tener idea de lo que significa para nosotros, y para los muchos amigos que tiene. En el caso, los que pertenecemos a la esquina colorada, tenemos la enorme satisfacción de tenerlo muy cerca, de contar con él en cada celebración, en cada momento íntimo. Lucho, de gran corazón y espíritu solidario, capaz de hacerse tiempo para comandar el club de nuestros amores, como para estar con nosotros en cada juntada, cada asado, cada guitarreada. Viene a nuestra mesa con su clásico saludo, para luego sentarse y plegarse a la conversación como uno más. Porque no nació en la barriada. Creo haberle escuchado que es oriundo de Trinidad. Pero el amor lo hizo recalar por estos lados. Fue otro de los forasteros que se robó una flor de nuestro jardín. Una de las lindas mozas que vimos crecer, hasta que "vino uno de ajuera y se la llevó. ¡Malaya!". Era hija del Wilson Quiroga y Aurora Fernández, una parejita de vecinos, un poco mayor que nosotros, que hizo nido cerca del club. El Wilson es de la historia íntima de Del Bono. Me atrevo a decir que por sus venas, y las de todos los "Chapeao" Quiroga, corre sangre pura bodeguera. "Chapeao" les dicen, porque como alguna vez conté, el padre de los Quiroga sabía montar un pingo al que le puso chapas de plata en todos los arneses. Y sus hijos fueron pues los "Chapeao, y los nietos también. Fue así que el Lucho se aquerenció con aquella muchacha, y cruzando la calle estaba el club, al que también aprendió a querer. Fue dirigente, y muy joven aún llego a la presidencia, siendo llamado por el destino a llegar muy alto en la consideración de la hinchada. Como recordé hace algunos domingos, supo atraer al club a un grupo de amigos dispuestos a ponerle ganas a la institución. Y extremaron los esfuerzos para armar un gran equipo y sacarlo de la "B", en el año 2004. Al año siguiente, continuó con su racha ganadora y de manera invicta logró por primera vez el título mayor del fútbol sanjuanino. ¡Qué alegría nos diste Lucho! Verlo a Del Bono en lo más alto, fue un sueño que nunca pensamos íbamos a ver, los que nacimos en el barrio y seguimos a nuestro "equipo chico", peleando contra todas las adversidades que se puedan imaginar. Después repetirían la hazaña en 2007 y entramos, por primera vez, en los torneos federales de la AFA. Este recuerdo es un homenaje y un agradecimiento en el día de tu cumpleaños. Y te canto con la hinchada "yo te lo digo, de corazón, dale Del Bono que te quiero ver campeón". Feliz cumpleaños, amigo.