El Hard Rock Stadium de Miami, Estados Unidos, vivió una verdadera fiesta con Lionel Messi y la selección argentina, que venció con facilidad 3-0 a Honduras en uno de los últimos amistosos antes del Mundial de Qatar, que comienza el próximo 20 de noviembre. El capitán por duplicado (su segundo tanto, una obra de arte) y Lautaro Martínez convirtieron para el campeón de la Copa América, que ofreció momentos de buen fútbol y estiró su invicto a 34 encuentros.
La diferencia de jerarquía se notó desde los primeros compases del encuentro. Los hondureños buscaron oponer orden al poderío albiceleste. Obediente, el equipo pasó siempre la línea de la pelota cuando no tuvo el balón y Castellanos le hizo marca personal a Messi, para no dejarlo pensar. Sin embargo, por momentos le dio aire, tomándolo a cierta distancia. Y eso terminó siendo letal.
Al mismo tiempo, apeló a la contra con pelotazos largos a Najar y Quito, pero la realidad es que le costó pasar mitad de campo. El juego fue una sucesión de jugadas de riesgo para Argentina, que movió la pelota con paciencia y fue agresivo al presionar.
A los dos minutos, Alejandro Gómez (extremo izquierdo apto para bajar y engancharse) probó por encima del travesaño. A los 7, un remate de De Paul se fue ancho. A los 10, Messi abrió para Molinas, quien centró para el Papu, pero se interpuso un defensor.
Y a los 15 se rompió la resistencia: la Pulga dio el paso atrás para alejarse de Castellanos y le regaló a Gómez un pase delicioso a la carrera. El del Sevilla envió el buscapié y Lautaro Martínez firmó el 1-0.
Más allá de un enganche y zurdazo de Messi que contuvo el guardameta López, el choque entró en un bache. Y además florecieron los roces, por impotencia o por diferencia de nivel, de parte de los jugadores hondureños. En el umbral del Mundial, brusquedades Un topetazo de Flores a Messi a los 38 provocó una gresca generalizada. Luego, un golpe a destiempo a Papu Gómez amagó con otra trifulca.
Pero bastó con que se despertara Messi para que el marcador se ampliara antes del descanso. A los 45, el Diez soltó un pase a Lo Celso, que entró como wing al área. Santos lo camiseteó y el árbitro sancionó el penal. 60 segundos después, el capitán ofreció una definición sutil para el 2-0.
Scaloni había prometido que usaría el duelo como plataforma de pruebas y en el entretiempo cumplió. Primero hizo entrar a Julián Álvarez y a Thiago Almada (debut absoluto en el combinado mayor), y luego les dio chances a Enzo Fernández y Nehuén Pérez. Sin la presión del resultado ni la oposición fuerte del adversario, Argentina hilvanó algunas jugadas de gran nivel estético que merecieron culminar en la red.
El hoy delantero del Manchester United tuvo un mano a mano que ganó López. Y luego una combinación entre Julián, Tagliafico y Almada (se abrió de piernas para dejar pasar el esférico) derivó en un tiro alto de Messi.
El atacante del PSG pareció obsesionado con devolverle el precio de la entrada a los casi 70.000 espectadores en el estadio. Y, a 22 minutos del epílogo, lo consiguió. Presionó Enzo Fernández y dejó a La Pulga en posición de marcharse cara a cara con el portero. Sin embargo, optó por tomar un atajo y dibujar una vaselina preciosa por encima de su humanidad para rubricar el 3-0.
El score pudo ser todavía más contundente. Enzo Fernández, que ingresó con el mismo desparpajo que mostraba en Defensa y Justicia o River, reventó el palo. En otra acción, Ángel Correa pasó entre dos y López rechazó con los pies. Si hasta Messi intentó una pirueta en el aire, aunque estaba en offside.
Este fue el anteúltimo amistoso de la Selección antes del Mundial de Qatar. El próximo será el martes, también a las 21 horas, pero en Nueva York y contra Jamaica. Cabe recordar que antes del 21 de octubre Scaloni deberá presentar la lista de los 26 futbolistas que viajarán al Mundial de Qatar. Por eso, estos encuentros son clave para analizar el rendimiento de los jugadores de cara al gran torneo.