Un tiroteo en un supermercado Walmart de El Paso, Texas, dejó al menos 20 muertos en la mañana de ayer -hora local- y un hombre estaba bajo custodia, después de que los aterrados clientes huyeron presas del pánico en el último ataque masivo con armas de fuego que vuelve a enlutar a los Estados Unidos. La cifra de muertos, confirmada anoche por el gobernador de Texas, Greg Abbott, podría aumentar ya que hay 24 heridos.
Muchos de los que fueron sorprendidos en el tiroteo estaban comprando artículos para la vuelta al colegio de los niños.
El sargento de la policía local Robert Gomez dijo a los periodistas que las autoridades descartaron la presencia de varios pistoleros y señaló que los primeros reportes indicaron que el agresor usó un rifle.
"Es una tragedia y no consigo entenderlo", dijo el alcalde de El Paso, Dee Margo, a CNN.
Citando una fuente de las fuerzas de seguridad, el canal de televisión local KTSM publicó en su sitio web que había dos fotografías del sospechoso tomadas por cámaras de seguridad cuando entraba al Walmart.
Las imágenes mostraron a un joven blanco con gafas, pantalones tipo caqui y una camiseta oscura que apuntaba con un aparente rifle de asalto. Asimismo, parecía llevar auriculares u orejeras.
Reuters no pudo verificar de inmediato la autenticidad de las imágenes.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo en Twitter que los reportes procedentes de El Paso eran "muy malos, muchos muertos".
"Hablé con el gobernador y le prometí el apoyo total del Gobierno Federal", escribió. "¡Que Dios esté con todos ustedes!".
Veronica Escobar, congresista demócrata de El Paso, dijo a CNN que la cifra de víctimas es "impactante". El Centro Médico Universitario de El Paso recibió a 13 pacientes, incluido uno que pereció, dijo el portavoz Ryan Mielke a CNN.
Algunos pacientes estaban siendo operados, mientras que otros estaban en condición estable, agregó. Dos de los pacientes que llegaron eran niños que fueron transferidos al Hospital Infantil de la ciudad, indicó.
La policía local hizo un llamado urgente de donaciones de sangre, afirmando que hay muchos heridos en varios hospitales cuyas vidas corren peligro.
El Departamento de Policía de El Paso dijo que la escena seguía activa en torno al centro comercial Cielo Vista Mall, cerca del Walmart, aunque no había una amenaza inminente para las personas. Otro portavoz policial, Enrique Carrillo, dijo que había una 20 víctimas, una cifra que podría incluir heridos y fallecidos. Asimismo, pidió a los que no habían podido localizar a sus seres queridos que acudieran a un centro de reunificación familiar en un colegio local, en vez de ir al centro comercial.
Walmart dijo en un comunicado: "Estamos impactados por los trágicos sucesos en el Cielo Vista Mall de El Paso (…) Oramos por las víctimas, la comunidad y nuestros asociados, además de las personas que llegaron primero al lugar para ayudar. Estamos trabajando de forma estrecha con las fuerzas de seguridad". En la escena del tiroteo convergieron rápidamente integrantes de varias agencias de las fuerzas de seguridad: policías, patrulleros estatales, agentes de Seguridad Nacional y de la patrulla fronteriza. Un testigo dijo que vio al menos a una persona dentro de la tienda con una herida fatal en la cabeza y a varios clientes con la ropa manchada de sangre. Otras tiendas en el cercano centro comercial fueron cerradas mientras la policía peinaba el lugar en el este de la ciudad, junto a la frontera con México.
Un video publicado en Twitter mostró a los clientes de una tienda por departamentos siendo evacuados con los brazos en alto. En las imágenes podía verse a un agente gritando "¡Las manos arriba!.
Cómo fue el escape para salvar sus vidas
Robert Curado, residente en la ciudad de El Paso, en la frontera con México y con 700 mil habitantes, explicó en declaraciones al diario local El Paso Times cómo se escondió junto a su madre entre dos máquinas expendedoras fuera del Walmart cuando el sospechoso les apuntó con el arma. "Allí es cuando el individuo intentó dispararme, pero falló porque como que me arrodillé", indicó.
Los clientes escaparon para salvar sus vidas, como Kianna Long, que estaba en el Walmart con su marido cuando escuchó los disparos.
"La gente estaba en pánico y corría, diciendo que había un pistolero", dijo Long. "Corrían cerca del suelo, la gente se lanzaba al suelo".
Long y su esposo corrieron a través de un almacén en la parte trasera de la tienda, antes de esconderse junto a otros clientes en un contenedor de acero en una zona de carga.
Un video gráfico del lugar publicado en las redes sociales mostró lo que parecían ser cadáveres y a personas heridas.
El tiroteo masivo de El Paso es el número 249 de estas características que tiene lugar en lo que va de año en EEUU.