Tras la aparición de otra de las variantes del coronavirus, la ómicron, el mundo científico se preocupó en estudiar cuáles son los síntomas que puedan llegar a ayudar a identificarla y, también, cuál es el riesgo que presentan los enfermos. Tras analizar los casos confirmados, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos confirmó cuáles eran los primeros síntomas que presentaron, en su mayoría.
Según la investigación publicada en Mirror, se halló que hay un síntoma general que llega a presentar el 90% de los infectados. “Muchos de los primeros casos notificados de infección por la variante ómicron parecen ser leves”, explicaron los expertos, pero remarcaron que “como con todas las variantes, existe un desfase entre la infección y los resultados más graves”.
El informe de los CDC destaca que “se esperaría que los síntomas fueran más leves en las personas vacunadas”, consideraron, aunque es algo que todavía quedaría por evaluar. Esta misma condición, según el organismo, se espera también en “aquellas con una infección previa por SARS-CoV-2 que en las personas no vacunadas”.
Además, los CDC aclaran que “las características de los casos descritos en este informe también podrían no ser generalizables, porque los hallazgos de los casos podrían estar asociados con características individuales”, describe el documento. En este sentido, explica que se analizaron 43 casos y que, de ellos, se constató que “solo el 7%” fueron asintomáticos o presentaban “síntomas desconocidos”.
La lista publicada por los CDC especifica que el 90% de los infectados con ómicron presentaron tos, en un 89%, fatiga, un 65%, congestión o secreción nasal, un 59%, siendo estos los tres más descriptos por los infectados. Luego, también presentaron dificultad para respirar, en un 16%, diarrea, un 11%, y, finalmente, pérdida del gusto u olfato, en un 8%, de los 43 estudiados.
Fuente: Mitre