En Alaska, durante el verano, el sol se pone muy tarde y amanece muy temprano. Es por eso que los fuegos artificiales, que son una tradición para celebrar el Día de la Independencia de los Estados Unidos, cada 4 de julio, no es la alternativa más vistosa.
Es por eso que en Glacier View, en donde a esta altura del año el sol se pone a las 11 de la noche y amanece a las 4.30, encontraron una manera muy particular de festejar: lanzan autos y camionetas desde un precipicio.
Los organizadores usan un método bastante rudimentario pero efectivo: traban la dirección y ponen un tronco sobre el acelerador para enviar el vehículo hacia una pequeña rampa de tierra que lo hará despegar hacia el vacío.
Los autos van todos artesanalmente decorados hasta su vuelo final y cargados con el combustible necesario que les permita llegar acelerando hasta el borde del precipicio.
Debajo se junta una multitud para ver volar a estos vehículos en una caída de casi 100 metros. La zona de espectadores se ubica cerca de la base de la montaña, bastante lejos de la zona de aterrizaje.
De esta manera, los locales y los turistas que se acercan para ser testigos de este particular modo de celebración ven la acción desde una distancia segura.
Además, los espectadores tienen antes una laguna artificial que sirve como una protección adicional contra las partes de los vehículos que puedan desprenderse y salir volando.
Los vehículos involucrados, muchas pickups y SUV, están todos deteriorados y muchos de ellos oxidados. Si tenían ese salto final, su destino era el desarmadero.