En medio de una segunda ola más virulenta que cuando comenzó la pandemia, Italia se cerró desde las 0 horas de hoy para evitar repetir los errores de hace un año, cuando se convirtió en el epicentro del coronavirus durante una cuantas semanas y vio cómo colapsó su sistema sanitario. El gobierno decidió imponer un cierre casi total hasta el domingo 27, fecha en que empezará la campaña de vacunación.
Serán cuatro días de lockdown donde estará prohibido de salir de la comuna de residencia, donde los bares y negocios estarán clausurados, y donde regirá un toque de queda entre las 22 y las 5 horas. Estas medidas alcanzan a 20 regiones del país caratuladas como "zona roja" por alta concentración de casos.
Esta cuarentena seguirá vigente hasta el domingo, momento en el que se aplicará a las primeras 9.750 personas la vacuna contra el coronavirus producida por la empresa Pfizer. Ese día se fijó como el "día de vacunación" establecido por los 27 países que componen la Unión Europea.
Desde hace unos días que Italia viene experimentando un aumento en la curva de contagios como sucede en gran parte de Europa. El país registró este jueves 18.040 casos, con una tasa de nueve positivos cada 100 test hechos, levemente superior al índice del 8% de los dos últimos días.
Además, hubo 505 muertos en las últimas 24 horas y llegó a los 70.900 desde que inició la pandemia. Otro punto de preocupación es que se dio a conocer un caso de la "cepa inglesa", según informaron medios locales. Se trata de una variante más contagiosa del virus que contrajo un paciente del centro del país, que no estuvo en el Reino Unido ni tuvo contacto con gente de allí.
Foto: EFE