“No sigo en pareja, lo que abro, lo abro porque siempre abro mis cosas, mostré un montón de mi pareja porque fue pura felicidad, me parece que no es justo para una relación tan hermosa como la que tuvimos, de casi un año, todo lo que se está diciendo”, comenzó diciendo Jimena Barón cuándo en Morfi le preguntaron por su separación de Juan Martín del Potro. 
 

“Yo quedo como una boluda, que no me importaría, porque me sale bastante bien el personaje, pero lo están dejando a Juan como un sorete de tipo cuando es una persona maravillosa, y tiene una familia maravillosa, y tiene amigos maravillosos. Todo lo que lo rodea a él es bueno, no se merece el final que están tratando de armar. Nuestro final real es que somos dos personas que tienen como prioridad número uno su laburo, cuando yo lo conocí mi laburo era otro, otra intensidad, él vivió toda mi cocina de la música, sin saber qué iba a pasar, en ese momento era bastante de malabarista todo lo que había que hacer para vernos y después empezó a ser imposible”, confesó.
 

 

“Tuve que decirme a mí misma: ‘Flaca, hacé memoria. Estás en un momento groso’. Me costó un montón, hasta económicamente. Yo no tengo una discográfica, ni un productor.  Toda la guita que yo tenía la puse en el proyecto. No soy millonaria, todavía la estoy recuperando. Entonces, tuve que autodecirme ‘Tu trabajo primero también, lo tenés que hacer al máximo, no podés no hacer un show, una publicidad. Yo tengo que estar acá, lamentablemente, teniendo como prioridad mi laburo”, siguió.
 

Sobre los rumores que decían que el tenista se había cansado de su hijo, ella contó: “Dijeron algo muy feo de mi hijo, que fue la causa, como si Juan se hinchó las pelotas. Juan se puso al hombro a Momo, a un montón de mis quilombos, la familia de Juan. Yo varias veces le dije: ‘Sos pendejo, vos no tenés un hijo, hay temas que tener que dejar que sean mis mambos, no necesito que te hagas cargo de todo'”.
 

“Es duro y triste. No es algo de un día para el otro. Lo veníamos charlando. Me fue imposible. Estar los dos haciendo laburos como angustiados o a medio pelo no era una opción. Lamentablemente ahora no se puede. Los dos estábamos pasándola mal y no tiene sentido pasarla mal”, concluyó.