Jorge Aballay es obrero metalúrgico y fue parte de la obra del circuito "San Juan-Villicum". El oriundo de Chimbas estuvo hasta el viernes trabajando en el autódromo albardonero pero ayer domingo aprovechando su día libre decidió ir junto a su familia a ver la competencia. Por eso llegó acompañado de su esposa Noelia Arroyo, sus hijas Guadalupe y Brenda y el pequeño Lautaro. El menú elegido por la familia chimbera fueron sánguches, mate y después asado para almorzar. "Es una sensación única haber colaborado con esta obra impresionante", expresó.
- Los Mercado que no son familia
Fernando y Gustavo Mercado son de Pocito. Facundo, Tomás, Maico y Efrain Mercado son oriundos de La Rioja. El grupo llegó a acampar antenoche al Villicum y a pesar de tener el mismo apellido no son familiares. Es que por esas casualidades del destino se conocieron entre la multitud que llegó hasta Albardón y formaron una grata amistad. Al grupo de los Mercado se unieron los mendocinos Fabián Paniello junto a Iván y Gonzalo Carmona. Todos llegaron el sábado y ayer previo al momento de largar la final del TC ya habían compartido varios asados, mientras en la parrilla estaba casi listo el último que serviría de almuerzo. Todos se manifestaron conformes con la organización y repartieron elogios para El Villicum.
PASIÓN DIVIDIDA
- Elogios al Villicum y amor por El Zonda
Son fanáticos fierreros de ley. Y por todos los años que llevan viendo carreras, son palabra autorizada para hablar. César Pacheco y su hijo Gustavo, junto a Pedro Guillemain y Carlos Alaniz, llegaron ayer bien temprano por la mañana para encontrar una buena ubicación que les permitiera poder hacer el clásico asado. Reconocieron la belleza del coqueto circuito albardonero pero la pasión que tienen por el Eduardo Copello resulta inevitable: "Este autódromo será súper moderno pero El Zonda es El Zonda y nosotros seguimos eligiendo ese trazado", contaron.