La pelea de unificación entre los dos campeones mundiales pesados británicos, Antony Joshua (24-1-0, 22KO) monarca de la AMB, FIB y OMB y Tyson Fury (30-0-1, 21KO) rey del CMB que está acordada de palabra y cuyo primer capítulo de las dos previstas tiene como fecha el 17 o 24 de julio, pasa por una nebulosa y después de una investigación realizada por el periódico inglés The Sun, surgieron un mar de dudas.
"No tiene dónde esconderse más", disparó Antonu Joshua sobre Tyson Fury.
Mientras Joshua se muestra entrenando en el gimnasio y sube a su perfil de Instagram posteos en los que se lo ve sacando lonjas a su físico para no dar ventajas, Fury hizo públicas su decepción sobre las distintas pautas propuestas.
El promotor Eddie Hearn propuso "tres o cuatro" acuerdos. La que, según la prensa, había obtenido más coincidencias era la de 65 millones de dólares para cada uno en la primera pelea y el mismo monto (130 millones) para la revancha, pero el 60 por ciento para campeón y 40 para el retador. Sugarhill Steward, entrenador de Fury, afirma que hay que pelear con público por la venta de entradas, pero eso es imposible ya que en el estadio de Wembley, sede elegida, sólo ingresaría el 20 por ciento de espectadores.