El oficialismo de la Cámara de Diputados buscará aprobar esta semana el proyecto del Poder Ejecutivo que modifica el régimen especial jubilatorio y de pensiones de jueces y diplomáticos, y cuyo rápido tratamiento es cuestionado por diferentes bloques opositores. El Frente de Todos tiene previsto darle media sanción al proyecto en una sesión prevista para el jueves al mediodía; siempre y cuando un día antes, en el plenario de comisiones previsto para las 14, obtenga el dictamen de mayoría.
Las comisiones de Presupuesto -presidida por el kirchnerista Carlos Heller- y de Previsión -que será encabezada por el también oficialista Marcelo Cassareto- escucharán primero las opiniones de los diferentes invitados, y luego se abocarán al debate entre los diputados.
Además de los funcionarios que el Poder Ejecutivo designe para concurrir a la comisión, se prevén las presencias de representantes de la Asociación de Magistrados, de la Asociación de Fiscales y de la Unión de Empleados Judiciales de la Nación (UEJN).
Más allá de la garantía de que expondrán todos los invitados que la oposición requiera, el oficialismo continúa recibiendo cuestionamientos sobre los que consideran que el proyecto recibirá un "trámite express", ya que ingresó a la Cámara baja el viernes 14.
Además, la oposición pide un actuario de la cantidad de jueces y fiscales del sistema, ante la posibilidad de que muchos magistrados con edad de retirarse anticipen los trámites para no perder el beneficio de cobrar el 82 por ciento móvil del último salario y no del promedio de los 10 años finales de la carrera, como establece la legislación propuesta.
El oficialismo tiene número suficiente en las comisiones para alzarse con el dictamen de mayoría, aunque deberá trabajar para conseguir un día después el quórum para sesionar, en caso de que Juntos por el Cambio decida finalmente no facilitar esa herramienta.
La principal bancada opositora atraviesa un fuerte debate interno entre el ala dura, que se opone al proyecto y los más conciliadores, que proponen cambios y que no pierden de vista el costo que implicaría votar en contra la eliminación de las jubilaciones de privilegio. En el interbloque que preside el radical Mario Negri se definirá en una reunión prevista para el miércoles las posturas a adoptar: por estas horas prevalece la chance de no dar quórum, de acompañar la votación en general y de plantear el rechazo a algunos puntos.
En tanto, el interbloque de lavagnistas y peronistas cordobeses, clave con sus 11 integrantes para conseguir el quórum, terminará de definir su posición entre el martes a la noche -más allá de que sea feriado- y el miércoles a la mañana, aunque la idea mayoritaria es acompañar la iniciativa.
En el Frente de Todos cuentan para el quórum a los 118 diputados propios, a la neuquina Alma Sapag (MPN), a los 8 del interbloque Unidad Federal para el Desarrollo. Los dos restantes serían de la izquierda, del interbloque mencionado en el párrafo anterior o, incluso, de Juntos por el Cambio.
Es que en el oficialismo no descartan que el debate de este proyecto marque el inició de "una ruptura en la principal bancada opositora, que ya mostró fisuras hace un mes durante la votación del Consenso Fiscal".
LOS DETALLES
El proyecto presentado por el Poder Ejecutivo eleva gradualmente la edad jubilatoria de jueces hasta llegar a los 65 años en 2025; establece el 82% móvil sobre un promedio de los últimos diez años -y no sobre el último haber-; y aumenta en un 7% los aportes adicionales, pasando del 11% al 18%.
"Como se están discutiendo jubilaciones de jueces y embajadores, pareciera que hay periodistas que no hablan"
SERGIO MASSADiputado nacional
"Por el fin de las jubilaciones de privilegio -que comparto- no queremos que vengan a vaciar al Poder Judicial"
MARIO NEGRIDiputado nacional
Advierten una gran ola de renuncia de jueces
Los magistrados de la Justicia nacional y federal advirtieron que la reforma jubilatoria que propicia el gobierno podrían generar, de aprobarse en los términos del proyecto original, una ola de renuncias en todo el país que agravaría la vacancia de titulares en los juzgados y tribunales.
Luego de conocerse el proyecto impulsado por el Gobierno, presentaron la renuncia los jueces Fernando Larraín, Miguel Caminos, Ricardo Rojas, Beatriz Bistué, María Cristina Bértola, Jorge López, Roberto Ponce y Carlos González, al igual que un grupo de fiscales, entre los que destaca Raúl Pleé.
Si bien la cifra es muy cambiante, en el Palacio de Justicia circuló en la última semana que los jueces y fiscales que ya presentaron la renuncia superarían el medio centenar y que ese número se incrementaría en una suerte de "efecto contagio".
Desde la Asociación de Magistrados y Funcionarios de la Justicia Nacional señalaron que sobre unos 700 jueces y fiscales del fuero federal y nacional en actividad, unos 350, es decir la mitad del universo de magistrados y representantes del Ministerio Público, estaría en condiciones de jubilarse por edad y aportes. "Ante la incertidumbre muchos están evaluando la posibilidad de irse y si eso ocurre generaría un montón de problemas", señaló a Télam el presidente de la Asociación, Marcelo Gallo Tagle. El mayor problema es que se agravaría la vacancia del 25% de los cargos que se cubren con subrogancias.