1. La búsqueda del tesoro: Este juego consiste en esconder un objeto en cualquier parte de la casa, la cual será dibujada a modo de plano en una hoja. La persona que haya escondido el objeto comenzará a dar pistas y acertijos para que los demás puedan descubrir dónde está el tesoro. El plano servirá para marcar los espacios de la casa en los que ya se buscó.

2. Adivinar el personaje: Es un juego ideal para varias personas ya que una será quien piense en un personaje y el resto deben adivinarlo haciendo preguntas que se responderán por sí o no.

3. Palabras encadenadas: Este juego fue un clásico de campamentos estudiantiles y viajes en coche al que puede jugarse muy bien en casa y pueden participar varias personas de todas las edades. El objetivo es unir palabras desde la última sílaba y lograr otra. Por ejemplo: la primera persona dice “caracol” y quien sigue dice “cola”. Que puede seguir así: lagarto – tomate – televisor – sorpresa… y así sucesivamente.

4. Veo, veo: Otro de los juegos clásicos en el que puede pasarse horas jugándolo. Consiste en que una persona mira y memoriza un objeto dentro del entorno en el que están quienes participen. Quien comienza el juego dirá: veo, veo. Quien acepte el juego preguntará: ¿Qué ves? a lo que se le responderá “una cosa maravillosa” y llegará la primera consulta: ¿de qué color?… Y allí comenzarán a nombrar cada una de las cosas de ese color hasta acertar o darse por vencido. En este último caso quien comenzó el desafío dirá qué vio y tiene derecho a seguir encabezando el próximo veo veo.

5. Convertir 4 cuadrados en 3 en solo 3 pasos: Para esto solo se necesitan 12 palillos o fósforos para intentarlo.

6. Ta Te Ti en papel: En un papel se hacen dos líneas horizontales y dos verticales, formando una cuadrícula de 9 espacios. Por turnos, cada jugador debe poner una X o un O, intentando hacer una línea vertical, horizontal o diagonal. Este juego puede encontrarse en cajas y en aplicaciones. También se puede hacer un tablero de Ta Te Ti en un cartón y jugar con botones de diferente color.

7. Tutti frutti: Consiste en tomar una hoja y separarla en columnas en las que se escribirán distintas opciones a completar. Por ejemplo: nombres propios, países, capitales, animales, flores, comida, etc. Quien comience el juego pronunciará la letra A en voz alta, y seguirá con el abecedario de manera interna, la persona sentada a su derecha le dirá “basta” para que quien arrancó diga la letra a la que llegó. Con esa letra, por ejemplo L, se debe completar cada una de las columnas.

8. La payana: Lo sencillo hizo de este juego uno de los preferidos de nuestros abuelos y todavía lo es de quienes aceptan divertirse con él. Para jugarlo solo se necesitan cinco piedras chicas y habilidad con las manos. Puede jugarse solo o con amigos. Cómo se juega: hay que tirar una piedra hacia arriba y juntar las restantes con la misma mano antes de que la primera caiga al piso. También se pueden usar dados o pelotas para jugar.

9. Pescar objetos: se necesitará una fuente, palangana o fuentón con un poco de agua en la que se tirarán tapas de gaseosas que serán atrapadas con palillos de brochete, por ejemplo.

10. Sombras chinas: Este es uno de los juegos más legendarios y divertidos. Solo será necesario una vela o lámpara, un espacio vacío como una pared sin cuadros o una tela y las manos. Delante de la luz se harán formas con los dedos que serán proyectadas como sombras en la pared. Es ideal para que los más chicos disfruten y se sorprendan al ver las formas.