Nació como Escuela de Artes y Oficios y su edificio estaba en Villa Colón, Caucete. Si bien en el transcurso de 8 décadas cambiaron de locación, de planes de estudio y pasaron miles de alumnos, sigue intacto su espíritu. Es la cuna formadora de oficios por excelencia. De ella egresaron técnicos que hoy se desempeñan en puestos claves. Es por eso que la comunidad educativa salió con todo a festejar sus 80 años de existencia. Se trata de la EPET Nº 1 Ingeniero Rogelio Boero. El acto central será hoy, pero vienen realizando actividades desde que comenzó el año.
Buscaban dar una respuestas a los chicos que querían trabajar. Además, en la zona se precisaba de soldadores, torneros, mecánicos, carpinteros y constructores. Es por eso que desde un primer momento estuvo abocada a la formación de oficios. Hasta 1944 funcionó en Caucete, pero el terremoto dejó el edificio en ruinas. Entonces, trasladaron la maquinaria y el mobiliario a una casa que estaba por calle Mendoza, en Trinidad. Tras las gestiones del primer director, Agustín Cardozo, se logró instalar la escuela en el predio de la Bodega Boca, que dependía del Estado provincial. El ingreso era por calle Tucumán. Luego de esto se reemplazó el nombre por Escuela Industrial-Ciclo Medio y en 1954 se convirtió en Escuela Industrial de la Nación-Ciclo Superior.
La escuela realizó una recopilación histórica exhaustiva cuando cumplió los 75 años y en este material consta que en 1959, al crearse el Conet (Consejo Nacional de Educación Técnica) las escuelas que dependían de él pasaron a llamarse ENET (Escuela Nacional de Educación Técnica). A la escuela sanjuanina le pusieron el número 1 por ser la primera en creación de gestión pública, Nivel Medio, Técnico y dependiente de la Nación. Seis años más tarde se le agregó el nombre de Ingeniero Rogelio Alejandro Boero (ver aparte).
El edificio en el que funciona hoy la escuela comenzó a construirse en 1972 y las tres plantas fueron inauguradas en 1974. La obra no fue fácil porque se edificó en el predio donde antes había funcionado una bodega. Es por eso que requirió el relleno, la compactación y el borrado de las viejas piletas.
La comunidad educativa sufrió un revés en 1986 cuando tras un incendio en planta baja quedó inhabitable parte del edificio hasta que se restauró en 1990. El proceso de descentralización de la educación a nivel nacional llegó hasta la Boero. Así, en 1992, comenzó a llamarse EPET Nº1 (Escuela Provincial de Educación Técnica).
En la actualidad la escuela tiene una matrícula de 2.000 alumnos y más de 400 docentes. Egresan unos 250 técnicos por año especializados en Automotores, Construcciones, Electromecánica y Electrónica. Desde 2012, que cambió el plan de estudio, la duración de la carrera es de 7 años y el título los habilita para trabajar en todo el país. Las jornadas de estudio se extienden durante todo el día porque además de las materias teóricas, los chicos deben cursar los talleres de cada especialidad.
El nombre de un pionero
En 1965 se le colocó a la escuela el nombre de Ingeniero Rogelio Boero. Esto para homenajear a quien fundó la Facultad de Ingeniería y fue directivo de varias instituciones como la Escuela Industrial Domingo Faustino Sarmiento y el Colegio Monseñor Pablo Cabrera. Además fue jefe del Departamento de Hidráulica y un férreo defensor de la educación técnica en la provincia. Su accionar fue clave para este tipo de formación en San Juan. Por eso se le puso su nombre a la primera escuela técnica estatal.
Los actos de hoy
La comunidad educativa de la Boero está de fiesta y si bien la fecha de la fundación fue el pasado 15 de noviembre, cuanto también se celebró el Día de la Educación Técnica, el acto central lo realizará hoy a las 9.
Luego del ingreso de los cuerpos de Bandera (además de la Boero estará la EPET de Albardón y la EPET Nº3), se procederá a cantar el Himno Nacional y se inaugurará un mural diseñado por Noelia Simoncelli.