La CEPAL mantuvo este jueves su proyección de crecimiento para América Latina y el Caribe en 1,1% en 2017, impulsado por la expansión de México, a pesar de un menor dinamismo de algunos países sudamericanos, donde destaca la crisis que golpea a Venezuela.
 

Brasil y México, las mayores economías de la región, alcanzarían un crecimiento de 0,4% y 2,2%, respectivamente, dijo la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL).
 

Así también mantuvo la proyección de 2% de crecimiento para Argentina, la tercera economía más grande de América latina.
 

"Entre los factores que afectarán positivamente el desempeño económico de la región este año se encuentran la moderada recuperación de la economía mundial (…) un leve repunte del volumen del comercio mundial y un mayor nivel de precios de los productos básicos", dijo Alicia Bárcena, jefa de la CEPAL.
 

El organismo, dependiente de Naciones Unidas, resaltó que desde la perspectiva del gasto se observa una ligera mejora de la inversión y un mayor dinamismo del consumo privado.
 

La entidad proyectó que el producto bruto interno (PBI) de Sudamérica crecería un 0,6% este año,mientras que las economías de Centroamérica y México se expandirían un 2,5%, en promedio.
 

El mejor desempeño de México y Centroamérica está influido por el "aumento de los ingresos por remesas y las mejores expectativas de crecimiento de Estados Unidos, su principal socio comercial", dijo la CEPAL.
 

En su informe, el organismo ratificó su cálculo de una contracción para la economía de Venezuela del 7,2% este año.
 

Pese a que la entidad destacó una mejora en los precios de las materias primas que exporta la región,rebajó los cálculos de expansión del PBI de Chile, Colombia y Perú.
 

Aunque la economía de la región se expandirá poco más de 1% en 2017, tras dos años de contracción, CEPAL enfatizó que la región debe implementar políticas económicas anticíclicas que promuevan la inversión pública y privada.
 

"Se trata de revisar las reglas fiscales para que permanezcan como instrumentos pro-estabilidad, pero que sean también pro-inversión. Este marco fiscal deber ir acompañado de una política financiera de estabilización del crédito y una política monetaria que apoye el crecimiento de la inversión", dijo Bárcena.

 

Ámbito.com