En abril de 2001, tres presos que llegaron a Tribunales para ser notificados por sus causas judiciales, lograron hacerse de una pistola, tomaron a cuatro rehenes y generaron un caos que duró once horas. Al parecer los delincuentes obtuvieron el arma en los pasillos del edificio, cuando eran trasladados de un juzgado hasta los calabozos, en el subsuelo. Luego de ese episodio se desencadenaron otros, como fugas dentro del edificio, lo que siguió revelando lo precario del traslado de los internos, que pasan por los mismos lugares que abogados, jueces, personal y público en general. Ahora, la Corte de Justicia tomó la decisión de realizar mejoras en el subsuelo, donde harán salas de audiencias para que los detenidos sean notificados de las resoluciones por el personal de los juzgados y así, no tengan que andar transitando, con custodia policial, por los pisos del 25 de Mayo. Según las autoridades, las remodelaciones comenzarán entre septiembre y octubre para que el sistema esté listo antes de fin de año.
No es la primera vez que la Justicia tiene en manos un proyecto de este tipo. Luego del episodio de 2001, hasta se pensó en instalar una escalera que conecte el estacionamiento con los juzgados. Inclusive, cuando asumió el actual Secretario Administrativo de la Corte, Javier Vera, planteó la necesidad de un cambio, pero en ese momento no encontró eco.
Ahora, la nueva propuesta fue planteada por el cortista Guillermo De Sanctis, quien adelantó las refacciones en una entrevista en Radio Sarmiento. Vera receptó la iniciativa y el máximo tribunal en pleno le dio el OK en una acordada que salió la semana pasada. El anteproyecto aprobado busca generar siete salas de audiencia en el mismo lugar donde están los calabozos, lo que permitirá que los presos no tengan que salir de ese espacio para que sean informados de procesamientos. Además, ahí se les tomará indagatoria y se realizará las llamadas ruedas de reconocimiento. Dentro de los cambios, habrán pasillos independientes: uno para el traslado de los detenidos y otro, para el personal judicial (ver Infografía).
Según el Secretario Administrativo de la Corte, “entre 500 y 700 son los presos que llegan por mes a Tribunales” y todos circulan por los pasillos de ese edificio. Además, adelantó que, en busca de reducir esa cantidad, la Corte decidió que la mayoría de las notificaciones se produzcan en el Penal, “lo que ayudará disminuir en 100 el número de internos que en promedio llegan por mes al edificio 25 de Mayo”.
Por su parte, De Sanctis manifestó que “la mayoría de los internos llegan para ser notificados, un proceso corto. Esto es una solución digna, funcional, ordenada y respetuosa del asistente a Tribunales”.
Desde la Unión Judicial se mostraron a favor de la obra. “Hemos tenido casos donde empleados han sido empujados, golpeados y hasta escupidos por detenidos que son trasladados por los pasillos. Este es un reclamo de años y es una necesidad”, dijo Sebastián López.
Los casos más resonantes
La toma de rehenes en Tribunales ocurrió el 17 de abril de 2001 y desde ese momento, se plantearon mejoras en el edificio que no se llevaron a cabo.
Otro de los episodios recordados ocurrió cinco años después, en el mes de junio, cuando dos detenidos empujaron al custodio que los trasladaba y emprendieron la fuga. Fueron atrapados a los pocos metros, en la plaza Aberastain. En 2007, otro preso logró soltarse de las esposas que llevaba puestas y, ayudado por su familia, salió de Tribunales y llegó hasta la calle Jujuy y Córdoba, donde fue capturado por un policía de civil y otros dos uniformados. Luego, en abril de 2008, un delincuente condenado a 6 años de prisión se escapó del palacio de Justicia, después de que un cómplice le hiciera una zancadilla al custodio que lo trasladaba. El malviviente se escapó por la puerta principal y fue apresado tiempo después.