Noralí Hornz, una empleada judicial de 34 años, fue denunciada por estafar a unas 30 personas usando sus identidades para pedir créditos personales. Lo sorprendente es que la mayoría de las víctimas eran sus compañeros de trabajo. Los montos robados iban entre los 100 mil y 800 mil pesos.
El caso trascendió por los escraches en las redes sociales que hicieron algunos afectados y se descubrió que repetía la modalidad de estafa con muchas persona.
Hornz trabaja en la oficina de Violencia de Género de los tribunales mendocinos en San Martín, a 50 kilómetros de la ciudad de Mendoza y ciudad cabecera de la zona Este provincial. Según relataron sus compañeros, le habían entregado sus datos personales, con los cuales la presunta estafadora habría conseguido tramitar préstamos personales a su favor por una suma total de hasta 6 millones de pesos.
La primera denuncia penal ingresó a la fiscalía de Rivadavia. Pero la fiscal a cargo, Valeria Botini, tuvo que inhibirse de investigarla porque descubrió que varios de sus propios empleados de la Fiscalía habían sido víctimas de la estafa.
“No me gusta tener que hacer esto, pero no se puede tapar más y nos ha afectado a muchas personas. Norali Hornz, de San Martin, una compañera nuestra de trabajo pedía una copia del DNI, para una encuesta de la facultad, y sacó préstamos a nuestros nombres, por montos exorbitantes”, cuenta Silvina López en de Facebook.
La mujer explicó que "ya somos 20 personas que hemos resultado damnificadas, pero tenemos las sospechas que somos muchos más! Así que si la conoces y en algún momento le entregaste alguna documentación, consulta en las entidades financieras de crédito mágico, crédito argentino y caja forense, porque son los lugares que hemos encontrado que le otorgaron préstamos".
Una de las denunciantes, también empleada judicial, contó que fue a pedir un préstamo personal en el Banco Nación y allí supo que tenía dos créditos en financieras pero que ambos habían sido cancelados.
El artilugio para pedir el DNI de sus víctimas quedó registrado en un mensaje de WhatsApp que está en poder del fiscal: “Estoy haciendo una encuesta con abogados y procuradores sobre una tesis que estoy armando. Son 3 preguntas. Si querés te las respondo yo, muchos me han pedido eso, jajaja. Pero necesito acreditar que el encuestado existe y que no lo inventé. Por eso me piden fotos del DNI. Si me podés hacer el aguante te pongo como encuestado y me mandás la fotos”, proponía la acusada.
Otra de sus compañeras contó: "En mi caso sacó un préstamo de 80 mil pesos, pagó dos cuotas, de un total de seis". Otro denunciante contó al diario MDZ cómo fue contactado por la estafadora: “Hace 4 años que no la veía, y de pronto apareció por Instagram para contarme sobre este supuesto trabajo práctico".
Cuando la empleada fue denunciada en las redes sociales por algunas de sus víctimas, las llamó para explicarles el destino del dinero. "Me dijo que reconocía su error y que supuestamente está enferma", relata el afectado. "Aparte me dio una copia de un libre deuda, pero obviamente yo desconfío", agregó uno de los denunciantes.
Ayer, luego de que trascendió la noticia, Hornz se entregó a la Justicia y quedó detenida. El fiscal Oscar Sívori la imputó por estafas reiteradas y falsificación de instrumentos públicos y privados.
Fuente: Minuto Uno