La actividad económica durante el segundo trimestre del año se desplomó 4,9% en relación a igual período de 2022, afectada por la sequía histórica que hundió al sector agropecuario, según datos de Indec publicados ayer. Pero esta debacle de la economía tiene otro capítulo más inquietante: la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) modificó ayer su pronóstico de junio sobre Argentina que, a la caída prevista para 2023, le sumó ahora una contracción de 1,2% en 2024 en lugar de un crecimiento del PBI de 1,1%.

En junio, la OCDE estimaba que el PBI argentino rebotaría un 1,1%, por lo que los economistas ajustaron la cifra 2,3 puntos hacia abajo. Esta cifra convertiría a la Argentina en el único país del G-20 en tener una recesión durante 2024, además de demostrar un fuerte deterioro en la variable frente al informe pasado.

La inflación en el país sería del 118,6% para este año y 121,3% para el próximo. Tanto Alemania como Argentina son los únicos países del G-20 con retrocesos para este año, según el organismo. En los países del G-20 se espera que la inflación promedio pase del 7,8% anual en 2022 a 6% en 2023 y 4,8% en 2024, según el organismo con sede en París.

La OCDE volvió a empeorar sus proyecciones para la Argentina. A pesar de que la entidad estima que la economía global cerrará el año con un crecimiento del 3% promedio, el país vuelve a ir a contramano del mundo y se espera que enfrente una recesión económica durante 2023 y 2024.

Se trata de un caso atípico dentro del G-20, el grupo que engloba a países de los cinco continentes. Juntos, representan el 85% del producto bruto global. De acuerdo con el informe provisional de Perspectivas Económicas de septiembre, titulado "Enfrentar la inflación y el bajo crecimiento", el PBI de la Argentina se contraerá un 2% para este año, 0,4 puntos más que las estimaciones de junio (-1,6%). Los datos difundidos ayer por el Indec respaldan el oscuro pronóstico de las OCDE. Además de las caída del 4,9% en el segundo trimestre del año, el Producto Bruto Interno (PBI) entre abril y junio de este año se colocó 2,8% por debajo del registrado entre enero y marzo, informó el organismo.

El sector agricultura y ganadería descendió 40,2% en el segundo trimestre con respecto a igual período del año anterior debido a la fuerte sequía que afectó al sector, en tanto la pesca presentó una caída interanual de 30,5%. La explotación de minas y canteras, donde inscriben la explotación de litio, ascendió 6,3%, al tiempo que la industria manufacturera registró un descenso de 1%, mientras que la actividad de la construcción tuvo un crecimiento de 1,8%, debido a las obras realizadas en el sector minero y petrolero.

La distribución de electricidad, gas y agua disminuyó 6,3% en el segundo trimestre de 2023 con respecto al mismo trimestre de 2022, y el sector transporte, almacenamiento y comunicaciones tuvo un descenso de 3,7%. El sector comercio mayorista, minorista y reparaciones tuvo un incremento de 0,6% y el rubro hoteles y restaurantes registró un aumento de 6,4%. Y durante el segundo trimestre de 2023, la actividad de intermediación financiera tuvo una caída de 3% interanual.

 

El auge asiático

La mayor parte del crecimiento mundial 2023 provendrá de las potencias asiáticas: India (6,3%), China (5,1%), e Indonesia (4,9%). Mientras tanto, entre las potencias, EEUU crecerá 2,2% en lugar del 1,6% estimado en junio y 1,3% el año próximo, Francia, 1% y 1,2%.