La figura de Roger Federer atraviesa fronteras y no debe haber lugar en el mundo cuyos tenistas no reconozcan el legado del suizo. En San Juan, la noticia causó impacto y algunos de los referentes no sólo destacaron el talento de Federer, sino fundamentalmente su humildad, el respeto que tuvo por sus rivales y su capacidad para mantenerse tanto tiempo en el más alto nivel.
"Federer generó un antes y un después en el tenis. Es un virtuoso, que ha mostrado en la cancha siempre una elegancia y un comportamiento admirable. No es sencillo competir a ese nivel y él siguió jugando hasta los 40 años, haciendo parecer que todo es fácil, cuando no lo es. A diferencia de otros grandes, que se retiran por cualquier cosa, Federer jamás abandonó un partido; y es de esas deportistas respetados por todos, por los jugadores, por los entrenadores, por los árbitros; eso lo consiguen los grandes", dijo Juan Fernández, quien recientemente estuvo jugando el Mundial Master de tenis en Europa.
Por su parte, Pablo Usín, otro de los tenistas sanjuaninos que sumó puntos ATP, destacó que "Federer ha tenido la enorme capacidad de mantenerse durante muchos años en un ritmo de competencia muy elevado, algo que es muy desgastante desde lo físico y lo psicológico. Jugar semana tras semana en distintos tipos de superficies, sosteniendo la presión y además hacerlo lejos de la familia es un claro ejemplo de perseverancia. Es y será un ídolo durante mucho tiempo".
A su vez, el extenista y actual entrenador, Sebastián Allende, no mostró dudas: "Para mí, es el más grande de todos los tiempos. Haber ganado todos esos torneos de Grand Slam, siendo tantos años el número uno del mundo lo hacen el más grande de la historia". Facundo Alvo, en tanto, coincidió con sus colegas y colocó a Federer en el pedestal de los mejores. De hecho, la admiración de Alvo por el suizo es tan grande que lo lleva tatuado en su piel. "Ya no hay nada para pedirle. Sólo agradecerle por lo que dio", dijo.