Barcelona inició los entrenamientos que marcó el inicio de la era de Ronald Koeman como técnico, pero a la vez un período muchísimo más relevante: el primer día de trabajo post Lionel Messi, quien tomó la decisión de dejar el club tras 20 años y todavía no tiene nuevo destino definido, en medio de un complejo conflicto.
Sin la Pulga, que el domingo ya se había ausentado de la toma de muestras para los tests de coronavirus, el plantel del Blaugrana practicó en la Ciutat Esportiva Joan Gamper con la presencia de 19 futbolistas, entre ellos Luis Suárez y Arturo Vidal, que ya fueron notificados por el DT que no continuarán en su proyecto.
Hubo caras nuevas como las de los recién llegados Trincao y Pedri, mientras que la de Messi fue la única ausencia. También faltaron el bosnio Miralem Pjanic, recientemente comprado a Juventus por 60 millones de euros, quien dio positivo por coronavirus en un testeo previo a los de este fin de semana, e Ivan Rakitic, pues está ultimando los detalles de su vuelta a Sevilla.
Al menos ayer, no hubieron novedades sobre el destino de Messi y cómo se destrabará su salida del club catalán donde es el máximo referente de la historia.