Más cerca. La familia venezolana de Pedro Álvarez Oviedo ya arribó a la Argentina. Por ahora se encuentra en Salta desde donde emprenderá el viaje a San Juan.

 

A partir del domingo que viene comienza una vida nueva y un futuro esperanzador para Pedro Álvarez Oviedo, su esposa Yanexy y su hija Eucaristy María, de 5 años. Ese día, esta familia venezolana llegará a San Juan, huyendo del hambre y del riesgo de muerte de los que fue víctima en su país natal. Su historia conmovió a los sanjuaninos que se movilizaron para hacer realidad su llegada a la provincia. Le consiguieron desde una casa hasta trabajo. Según datos de la Dirección de Migraciones, entre el 2016 y lo que va del 2018, ingresaron a San Juan 228 venezolanos en busca de recidencia.

Todo comenzó el 21 de abril pasado. Yanexy, que pertenece al movimiento católico de Renovación Carismática, le envió un mail a Laura Sirerol, una sanjuanina que también pertenece a este movimiento. En el mensaje, la mujer venezolana pedía una "oración" en nombre de su familia para poder salir de la situación angustiante que atraviesa y por la posibilidad de emigrar a otras tierras en busca de una vida mejor. Los sanjuaninos no sólo rezaron por los Álvarez Oviedo, sino que se movilizaron para ayudarlos a viajar y sentar raíces en la provincia. "Con una amiga nos propusimos ayudar a esta familia. Y sin pensarlo, mucha gente se sumó a esta iniciativa. Uno de ellos fue el padre Víctor Hugo Gallardo, de la Parroquia Cristo Rey de Caucete, quien hizo correr la voz para que más gente brindara su solidaridad. Es increíble todo lo que se consiguió, gracias al buen corazón de la comunidad, especialmente de los cauceteros", dijo Laura Sirerol.

Dos hermanas cauceteras adultas mayores que viven solas, cedieron un quincho del fondo de su casa para que viva esta familia venezolana. Otros vecinos ayudaron a acondicionar las instalaciones, mientras que un empresario, también de Caucete, ofreció darle trabajo a Pedro Álvarez Oviedo ni bien lleguen a la provincia. Mientras que otras personas donaron todo lo necesario para amoblar la casa, ropa de cama y hasta juguetes nuevos para Eucaristy María. Frente a esta manifestación de solidaridad, Yanexy no pudo contener las lágrimas. Habló con DIARIO DE CUYO para contar su dramática historia y agradecer la ayuda recibida.

"No encuentro palabras para agradecer la ayuda de los sanjuaninos. Sé que el Señor es grande y que te pone en camino muchas piedras, pero también a personas que te ayudan a sobrellevar la carga. Estas personas que nos ayudaron no sólo son nuestros hermanos, sino también nuestros ángeles", dijo entre lágrimas Yanexy.

La mujer contó que la mala situación de su familia se agravó hace 5 años. Fue cuando ya la gente dejó de contratar los servicios de albañilería y herrería que ofrecía su marido. Desde entonces tuvieron que sobrevivir con el sueldo que ella ganaba en una empresa donde se desempeñaba como asistente contable. Su salario sólo les alcanzaba para comer tres días a la semana y para nada más. "Por esta falta de comida un día compramos uno de los pollos que vendía el Gobierno a un precio más bajo. Estaba en mal estado y mi hija contrajo salmonella. Estuvo 30 días internada en Terapia Intensiva y con pocas probabilidades de vida. Pero, por gracias de Dios, se salvó y no le quedaron secuelas. Fue tanta la angustia y el miedo de que se muriera que fue en ese momento que decidimos emigrar, aunque eso nos provoque emociones encontradas. Por un lado estamos tristes por tener que dejar la tierra que nos vio nacer y a nuestros familiares y amigos. Pero, por otro, felices, entusiasmados y esperanzados en tener una vida mejor en San Juan, acompañados por el apoyo y afecto de los sanjuaninos. Vamos a estar eternamente agradecidos y vamos a tratar de dar lo mejor de nosotros para devolverles algo de lo tanto que nos han dado y sin siquiera conocernos", dijo la mujer.

 

Más inmigrantes venezolanos

 

Enrique Delgado, a cargo de la Dirección de Migraciones, dijo que en los últimos tres años se registró un récord en la cantidad de inmigrantes venezolanos que ingresaron a San Juan y tramitaron la residencia. En el 2016, año en que comienza a registrarse este movimiento, ingresaron 8 ciudadanos venezolanos a la provincia; en el 2017 fueron 80; y en lo que va del año ya ingresaron 140, haciendo un total 228 en los últimos 3 años. "Hasta antes del 2016, los dos flujos migratorios principales que ingresaban a la provincia estaban conformados por bolivianos, en primer lugar, y chilenos en segundo lugar. Pero este panorama cambió. Ahora en primer lugar están los venezolanos a la par con los bolivianos, y luego siguen los chilenos", dijo Delgado.

 

Los sirios, también con ayuda local

 

Desde que comenzó la guerra en Siria, millones de familias debieron dejar atrás sus vidas y huyeron. Muchas de esas personas (aproximadamente 2 millones de ellos) escaparon al El Líbano, donde fueron recibidos en campos de refugiados. Desde ahí, algunos lograron ser recibidos en otros países. Este es el caso de Mustafá Ali y Cefin, una pareja joven que tiene una beba de un año. Ellos se transformaron en la primera familia de refugiados sirios en radicarse en San Juan y que llegaron también gracias a la solidaridad de la gente. La familia llegó a la provincia en septiembre pasado, tras dos años de un exhaustivo trabajo de los miembros de la iglesia cristiana Renacer, que fue la institución que la recibió y ayudó a su reinserción.