Ayer, el santuario de San Expedito, en la localidad caucetera de Bermejo fue un verdadero escenario de fe y devoción. Más de 10.000 devotos del santo de las causas urgentes participaron de la procesión en su honor bajo la lluvia. Fue durante las Fiestas Patronales que como, año tras año, atrae a fieles de diferentes provincias que llegan a hacerle alguna petición o para agradecerle alguna bendición recibida.
Desde bien temprano comenzó a llover de manera torrencial en Bermejo, pero esto no detuvo a la gente que llegó al santuario hasta a caballo para participar de la celebración.
La procesión arrancó unos minutos antes de lo previsto, aprovechando que la lluvia paró. Pero, de todos modos, los fieles que participaron de la misma no se salvaron de mojarse. A pocos metros de iniciada la caminata con la imagen del Santo comenzó a llover nuevamente. Con paraguas, bolsas y cartones, los devotos trataron de resguardarse un poco del agua para poder terminar el recorrido por las calles del pueblo.
La caminata fue lenta y no sólo por la cantidad de participantes y de vehículos estacionados en los costados de las calles, sino por el cuidado con el que la gente tuvo que caminar para tratar de evitar los charcos de agua que formó la lluvia. Y no resbalar por el guadal, también consecuencia de las precipitaciones. Es por eso que los danzantes de la Virgen de Andacollo, de Villa Krause, que encabezaron la caminata tuvieron que realizar las diferente coreografías con mucho cuidado para no resbalar y caer.
El avance de la procesión también se hizo lento por la gran cantidad de personas que se ubicaron a los costados de la calle para filmar con sus teléfonos el paso de San Expedito y después sumarse al contingente, protegiéndose de la lluvia con cualquier elemento disponible como carteras y bancos.
Llovió durante toda la procesión y continuó por un tiempo más, por lo que los devotos participaron de la celebración de la misa bajo el agua. Al igual que los fieles que aún continuaban haciendo fila para poder ingresar a la capilla y tocar la imagen del Santo.
Terminó la misa y aún seguían llegando al santuario colectivos repletos de devotos de todo el país que desafiaron el clima por su fe.
NORMA VÁZQUEZ
Con su hijo desde Buenos Aires
Por primera vez visitó el santuario de San Expedito. Fue para acompañar a su hijo, Darío Ochoa que lleva tres años consecutivos visitando al Santo para agradecerle por la salud y el trabajo.
PAOLA CALDERÓN
Junto a su familia desde San Martín
Dijo que ya "perdió la cuenta" de cuántas veces participó en la procesión de San Expedito junto a su familia. Y que algunas veces lo hizo para pedirle al Santo alguna bendición y otras para agradecerle.
LUCÍA BUFANI DE RAWSON
En la procesión, pese a una caída
Lleva 10 años participando de la procesión de San Expedito, pese a los contratiempos. Este vez se cayó tras resbalarse en el barro, pero igual participó de la caminata para agradecer por tener salud.
MARÍA SEIJA DE CÒRDOBA
Con mucha fe y el oxígeno a cuestas
Desde hace 20 años que viaja desde Carlos Paz para visitar el santuario de San Expedito y agradecerle por "seguir viva" pese a las enfermedades. Los últimos años llegó usando la mochila con oxígeno.