En Santa Fe, Colón siguió de festejo. Después de lograr la clasificación a la final de la Copa Sudamericana, el "Sabalero" ganó ante su gente para estirar la alegría y hacer completa la celebración. El partido fue válido por la octava fecha de la Superliga. Con el 1-0, tomó aire para escapar de la zona baja en la tabla de los promedios y al mismo tiempo frenó a Argentinos. Los de La Paternal venían invictos y tenían la chance de igualar a Boca en lo más alto, pero fueron inofensivos y conocieron la derrota por primera vez en este torneo. La pelota era de Argentinos, pero la iniciativa de Argentinos. La primera situación de peligro fue del Bicho y el gol fue de Colón. Y no pudo ser de otra manera que de pelota parada, es que de los ocho gritos que pegó en este campeonato el Sabalero, seis surgieron de balones detenidos.
Esta vez fue un tiro de esquina desde la derecha. Luis Miguel Rodríguez sorprendió a toda la visita, que esperaba un envío aéreo. ¿Qué hizo el Pulga? Amagó y le dio un pase por abajo a Cristian Bernardi, que desde la medialuna sacó un fuerte derechazo. La pelota se desvió en Jonathan Sandoval, descolocó a Lucas Chaves y se metió en el arco del Bicho.
Otra vez "la Pulga"
José Luis Rodríguez nuevamente se vistió de figura en el equipo que conduce Pablo Lavallén. Al culminar el encuentro, "la Pulga" valoró el triunfo y no se enfocó en la final de la Sudamericana, sólo hizo hincapié en el clásico que se les avecina por la Superliga. "Es importantísimo ganar, teníamos que hacernos fuerte de local y sumar puntos que nos permiten respirar abajo y pensar en la próxima clasificación a la Copa. Esta victoria es un merecido reconocimiento a este gran equipo", expresó. Consultado por la final que se les avecina por la Copa Sudamericana con la que sueña todo Santa Fe, la "Pulga" puso los pies sobre la tierra. "Son dos cosas diferentes, tenemos 45 días para pensar en la Sudamericana. No podemos descuidar la Superliga y nuestro objetivo después de clasificarnos a la final era ganarle a Argentinos, un equipo difícil que llegaba invicto y nosotros le ganamos. Nos sirve el envión anímico porque llegamos bien al clásico, esos son partidos que se tienen que ganar, no importa cómo lo jugués, sólo tenés que estar bien de la cabeza", afirmó.