Durante la última semana Geoff Peterson, el dueño de una granja ganadera de Australia, se convirtió en uno de los hombres más solicitados del país. La razón salta a la vista: todos quieren conocer la historia de “Knickers”, la res gigante.

 

Con sus 1400 kilogramos de peso y sus casi dos metros de altura, Knickers es uno de los animales de su especie más grandes del mundo, y es su tamaño lo que le ha alargado la vida. Peterson le explicó a ABC News que Knickers se salvó del matadero porque “era demasiado grande para entrar en la planta de procesado”.

 

El animal no es una vaca sino un cabestro, un toro castrado que se utiliza como guía y para producción de carne. El granjero, que originalmente lo había adquirido para guiar el ganado, imaginó que conseguiría un buen precio al ver su enorme tamaño, pero para entonces la suerte estaba del lado de Knickers.

 

 

 

Aunque las fotos y los videos son realmente sorprendentes, analizar el caso desde cierta perspectiva confirmará que en realidad esta “vaca gigante”, como han titulado varios medios, no es ni “vaca” ni “gigante”. 

 

Knickers en un bovino de raza Holstein, cuyos machos adultos suelen pesar alrededor de 1000 kilogramos y medir alrededor 180 centímetros de alto. Eso significa que el animal australiano es más grande que el promedio, pero no necesariamente gigante.

 

 

 

Además, en las fotos que se han viralizado las redes e ilustran esta nota, Knickers se encuentra rodeado de animales de raza wagyu, originaria de Japón, cuya altura promedio ronda los 137 centímetros. Esa comparación inmediata lo hace parecer más grande de lo que en realidad es.

 

También hay que tener en cuenta que usualmente a los machos se los envía al matadero a los tres años, por lo que con siete años de edad, Knickers ha tenido bastante más tiempo para seguir creciendo.