El presidente de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA), monseñor Oscar Ojea, sostuvo que el Gobierno ‘ve con optimismo el futuro a mediano plazo‘, pero que desde la Iglesia están ‘hondamente preocupados por los términos inmediatos‘ y advirtió sobre el ‘humor social‘ y ‘un síntoma de depresión‘ que se advierte en la sociedad de pensar que no podemos resolver nada.
El obispo de San Isidro y extitular de Cáritas ratificó la preocupación del Episcopado por la situación social y los recientes índices de pobreza difundidos tanto por la UCA -que la ubicó en el 31,3%, como los datos del Indec que fueron aún mayores: 32%-, y adelantó que en la próxima visita que harán todos los obispos al papa Francisco, en el marco de la denominada visita ’ad limina’, le llevarán su ‘preocupación social‘.
Las mediciones de pobreza corroboran lo que vamos viendo en este último tiempo y eso oscurece aún más el panorama. Nos preocupa la creciente afluencia a los comedores y percibimos que hay muchísimo temor a perder el trabajo. La situación de las pymes se ve con bastante alarma. Parte de la producción está detenida y estamos empezando a ver con algún desconcierto todo esto. La situación social se hace cada vez más complicada’.
Ojea denunció que ‘la democracia tiene una deuda social pendiente’, al tiempo que advirtió sobre unas elecciones ‘bastante reñidas y confrontativas’.