Cien años son historia pura, sea cual sea la naturaleza de lo que afecte y hoy, la Liga Caucetera de Fútbol tiene encima ese enorme privilegio de llegar a su primer centenario con la misma pujanza de los que forjaron su nacimiento y con la impronta del presente que busca decididamente seguir creciendo. 100 años de fútbol, de pasiones, de historias que zanjaron un riquísimo patrimonio. Tal vez, en ese 26 de septiembre de 1921 cuando esos visionarios seis clubes decidieron darle forma a su sentimiento por el fútbol de su departamento, no imaginaron que hoy esa Liga Caucetera de Football -tal cual reza en su acta fundacional- llegaría a los 23 clubes afiliados, con todos los rincones de Caucete y de San Martín incluidos en su mapa institucional. Pasó demasiada historia, con muchas alegrías y con otros momentos ácidos que pusieron a prueba el amor más genuino que genera el fútbol de tierra adentro. Villa Independencia -el decano caucetero con 114 años-, Pacífico, Belgrano, Colón, Rivadavia y el desaparecido Rufrano Izasa fueron ese sexteto de instituciones que decidieron dar ese paso: organizar la competencia, ordenar los clubes y crecer en todo sentido.
Seis clubes fueron los fundadores de la Liga. Hoy tiene 23 instituciones.
Nacieron así generaciones futbolísticas que le dieron nombre propio a Caucete. Jugadores legendarios, equipos históricos, campañas memorables fueron llenando de recuerdos cada uno de estos 100 años. Así, aquel sueño que tuvo Don Antonio Valdez, primer presidente de la Liga Caucetera, fue tomando forma. Las presidencias de Don Bosco Sarich, luego la de Antonio Villanueva y más adelante la de José Martín le fueron entregando vuelo propio a la Liga Caucetera en el concierto sanjuanino. Más acá, las presidencias de Antonio Molina y la actual de Nacif Farías, quien es ya el presidente con más períodos consecutivos al frente, le entregaron esa actualidad que le permite a la Liga Caucetera avanzar en todo sentido. En la década del 50, la adhesión de los clubes del departamento San Martín no hizo más que fortalecer aun el poderío que el fútbol del Este de San Juan ya tenía. Clubes como Atlético Peñaflor, San Isidro o Del Carril aportaron más solidez a todo lo que la Liga Caucetera ya tenía. Así, el producto final terminó siendo una institución que con 2.500 jugadores afiliados, tiene trascendencia total en el día a día de toda su zona de influencia.
Pero claro, a esa faceta feliz de la Liga centenaria se le contrapone el sueño de todos: volver a tener su estadio. Es que Caucete y su dura historia telúrica lo marcaron a fuego porque en 1977, su cancha fue destinada a la construcción del actual Hospital César Aguilar, en una lógica decisión por las secuelas del terremoto que asoló especialmente a la ciudad de las diagonales sanjuanina. Hubo promesa desde todos los estamentos oficiales de reivindicar ese destierro con un nuevo estadio. Pasaron los años, pasaron los gobiernos y la Liga Caucetera siguió esperando. En este proceso nuevo de la AFA, incluso con la visita del presidente Claudio Tapia a sus instalaciones, se reflotó el tema pero luego, la pandemia y la urgencia de atender otros temas postergó esa deuda que tanto duele.
Hoy, el presente pujante en sus primeros 100 años encontró a la Liga Caucetera metida en la faceta social que le asiste por ser agente de contención en todos los rincones del Este de San Juan. Colaborando con los clubes en la feroz etapa de aislamiento por el covid-19, se multiplicaron las gestiones para poder concretar de cuanta llegada estaba a disposición. Razones de un feliz aniversario.