Una docente de primer grado les dio una consigna a sus alumnos en la clase de matemática que, a simple vista, parece ser una más: ordenar una secuencia de números. Sin embargo, su mala redacción fue advertida por uno de sus alumnos que respondió exactamente lo solicitado y dejó en evidencia el pequeño error de su señorita.

 

La maestra había pedido escribir los números del 1 al 9 y, luego, hacerlo “al revés”. Lautaro, estudiante de la escuela Nuestra Señora de la Merced de Pergamino (Buenos Aires), respetó la consigna: no sólo ordenó los números de menor a mayor (aunque le faltó el 6) y de mayor a menor, sino que a las cifras 1, 2, 3, 5 y 6 las escribió al revés, literalmente.

 

 

 

La mamá de Lautaro tomó con risas la ocurrencia de su hijo en respuesta al pedido que hizo la maestra, por lo que decidió compartir la tarea en el grupo familiar, que luego llegó al canal TN.