Un modo de vida apacible donde la recreación y el esparcimiento ocupan un lugar importante, junto a la laboriosidad diaria. Esto es lo que distingue a los sanjuaninos.

Salvo una única y curiosa excepción, la del departamento Iglesia, que ha tenido una reducción del 4% de su población, que en 2010 era de 9.099 habitantes y en 2022 llegó a ser sólo de 8.763, la provincia de San Juan alcanzó en los últimos 12 años -período que abarcó el último Censo Nacional de Población, Hogares y Vivienda-, un crecimiento sostenido del número de habitantes que la posiciona como una de las jurisdicciones que más ha crecido en varios aspectos, a pesar de las condiciones adversas del país en las últimas décadas.

El crecimiento poblacional revelado por el Censo 2022 ubica a la provincia como un distrito del que no se han producido grandes emigraciones masivas, sino que por el contrario ha logrado contener buena parte de su población como una clara actitud de preferencia a un estilo de vida propio y característico de los sanjuaninos. El nivel de vida en San Juan está considerado como uno de los más aceptables del país, junto al de otras provincias con mayores recursos y desarrollo económico y social. Con lógicas excepciones la gente tiene en esta provincia un modo de vida que se caracteriza por su tranquilidad, facilidad para movilizarse y realizar diversos trámites, para acceder a actividades recreativas y para llevar una vida de relación con sus pares mientras realiza tareas laborales.

San Juan ha pasado de tener en 2010 un total de 681.056 habitantes, a contabilizar en 2022 un número de 818.234 habitantes, es decir un 20% más que representarían unas 137.179 personas. Este crecimiento se ha dado a pesar de que cada vez hay más jóvenes que expresan su intención de dejar la provincia en busca de nuevas posibilidades que, según afirman, aquí no tienen.

De todas manera durante el período que abarcó el 2001 hasta el 2010, también hubo un aumento de la población aunque levemente inferior, al alcanzar el 9,8% de los valores que se tenían anteriormente.

> El fenómeno en los departamentos

El crecimiento poblacional de San Juan se ha dado en varios ámbitos, particularmente en departamentos de la periferia del Gran San Juan, como Pocito, San Martín, Zonda, Ullum, Albardón y Caucete. Estas han sido las jurisdicciones donde la población ha aumentado en mayor proporción, alentada por diversos factores como la construcción de viviendas que de 164.253 ejecutadas en la década anterior, desde 2010 hasta 2022, se hicieron 265.434; la implementación de una mayor cantidad de servicios públicos; el mejoramiento de escuelas, la creación de instituciones de nivel terciario y de capacitación laboral y de carreras universitarias, entre otras mejoras en general.

Pocito con el 40% de aumento de su población es el departamento que más creció, contando actualmente con una población de 74.478 habitantes. De todas maneras, Rawson sigue siendo la jurisdicción más poblada de la provincia con 114.368 habitantes, aunque solamente haya crecido un 19 por ciento.

Los departamentos denominados "alejados", entre los que se incluyen la Zona de Frontera y cordilleranos, han logrado -a excepción de Iglesia que es el único que ha decrecido, como lo señalamos al principio- un notable crecimiento poblacional y de vivienda gracias a que la población en general ha logrado adoptar un estilo de vida que le permite permanecer y multiplicarse. Aunque siempre escasas, las fuentes de trabajo han conseguido retener a mucha gente que en otras circunstancias hubiese emigrado.

El hecho de que San Juan tenga el reconocimiento del Indec de ser la cuarta provincia del país en que la gente tiene más hijos (con una tasa de fecundidad de 2,32 hijos por mujer), precedida por Misiones, Salta y Formosa, ha dado lugar al fenómeno de que las poblaciones del interior de la provincia crecieran considerablemente. Los mayores, con una expectativa de vida de 75,3 años, también contribuyeron al crecimiento poblacional, que está dentro del promedio a nivel mundial.

> Salud, base de la calidad de vida

Para contar con una buena calidad de vida es fundamental garantizar un buen servicio de salud que esté al alcance de todos. La red sanitaria con la que cuenta San Juan, que incluye desde los grandes hospitales centrales hasta el más modesto puesto sanitario que funciona en villas o barrios, hace posible, de alguna forma, que mucha gente tenga acceso a este servicio y a una mejor calidad de vida. La población crecerá en la medida que se ofrezcan condiciones favorables basadas en un modo de vida de una provincia que quiere avanzar en su propio sentido.

Por Alfredo Correa
DIARIO DE CUYO