Fuentes del IPV aseguraron que la intención principal del Ejecutivo provincial es salir a la cancha en 2018 con un fuerte plan de ejecución y entrega viviendas en todo el territorio sanjuanino. El objetivo es alcanzar la entrega de 4.000 casas (ochocientas casas más de las que se entregaron en 2017). “La idea no es sólo entregar cuatro mil casas, sino que vamos a generar un dinamismo constructivo de cuatro mil viviendas, lo que implica más inicios de barrios y más obras en plena ejecución, por lo tanto va a haber mucho más movimiento habitacional”, explicó Juan Pablo Notario. Y agregó: “Para poder hacerlo vamos a utilizar nuevas herramientas como los datos de estadísticas directas que poseemos, la información que nos brinda el Banco de Tierras y no descartamos volver a implementar el impuesto lote hogar para financiar las viviendas de personas que no poseen recursos, que tienen entre 0 y 1 salario mínimo vital y móvil”.
El instituto posee actualmente proyectos en acción en Zonda, Ullum y Valle Fértil. “En Sarmiento se están evaluando terrenos y en Santa Lucía están ingresando varios terrenos nuevos. También se está avanzando en proyectos en 9 de Julio, 25 de Mayo, Calingasta, Pocito y Jáchal”.
Fuentes técnicas aseguraron que todos son terrenos en muy buenas condiciones que ingresaron por el Banco de Tierras, lo que se ha transformado en un elemento fundamental pensando en la solución habitacional de la provincia.
“Actualmente también trabajamos con un nuevo sistema a través de una consultora que provee estadísticas directas”, explicó el interventor mientras mostraba en su celular un listado numérico provisto por una aplicación que indica la necesidad habitacional de cada uno de los departamentos en virtud de la cantidad de inscriptos y las viviendas otorgadas en cada uno de los distritos de la provincia de San Juan.
“Este sistema nos permite tomar decisiones mucho más rápidas y acertadas, ya que tenemos los datos día a día, y siempre escuchando principalmente las necesidades cada una de las comunidades, las cuales son distintas: no es lo mismo un barrio para alguno de los puntos del Gran San Juan, o un barrio para una pequeña localidad de una zona alejada en el departamento Valle Fértil”. El mencionado sistema estadístico funciona como una herramienta básica que permite planificar estratégicamente. “Si yo digo o pienso que hay que hacer muchas viviendas, no significa nada. Si yo digo que en Valle Fértil hay 572 inscriptos pero cuando fuimos a hacer el re empadronamiento los datos me dicen que son 105 familias, estoy contrastando datos viejos con lo que en realidad está pasando”, agregó.
Estos datos motivaron a realizar el reempadronamiento que lleva adelante actualmente el Instituto Provincial de la Vivienda. “Cuando uno tiene la mejor información, puede tomar las mejores decisiones”, agregó Notario. El IPV ya ha marcado una grilla de 2.500 casas para el año 2018 en los departamentos alejados, a lo que se sumará lo que se pretende desarrollar en el Gran San Juan. “La idea es también ser más auto sustentables para el año que viene. Esto significa hacer un manejo de los fondos de tal manera de que esta rueda signifique recaudar, escriturar y tener posibilidades para que en definitiva se entregue una casa y esa cuota que se paga por ella le sirva al hermano o primo, vecino o amigo del que ya ha sido beneficiado. Que se vuelva a volcar sobre otro sanjuanino”, concluyó el funcionario.