Música para volar regresará a San Juan el 6 de mayo, esta vez al Auditorio Juan Victoria, para ofrecer nuevamente el show "Cerati Sinfónico" que han sacado de gira por la Argentina. La banda rosarina integrada por José Matteucci (batería y voz), Alexis Thompson, (guitarra), Julieta Sciasci, (bajo) y Bruno Moreno (piano y arreglados), cumple 10 años en 2022 haciendo estos espectáculos orquestados con arreglos propios, que también han abarcardo a Charly García y a Luis Alberto Spinetta. Y para esta tercera función en San Juan traerá un formato "A la carta", para que el público pueda elegir las canciones que quiere escuchar en la página de la banda (www.mpvolar.com.ar) hasta el martes o miércoles próximos. "Conocemos el Juan Victoria, tiene un sonido alucinante así que creo que se va ha poder apreciar el espectáculo, vamos a ser más de 50 personas en escena" dijo a DIARIO DE CUYO Matteucci en referencia a que se sumarán a ellos músicos y coreutas sanjuaninos.

El cantante habló sobre qué significa para ellos la obra del exlíder de Soda Stereo, sobre cómo la recibe la gente y sobre la diferencia entre lo que hacen y las bandas tributo.

-Llevan una década haciendo Cerati, ¿cómo se siente eso?
-El valor de la obra de Gustavo Cerati se agiganta a medida que pasa el tiempo, va sumando nuevos oyentes y cada vez trasciende más. La riqueza de esa obra permite que nosotros nos entreguemos y dediquemos a eso con mucho disfrute, porque a medida que van pasando los años y seguimos ahondando en ese repertorio , seguimos encontrando belleza; es una veta, un manantial en el que podemos seguir encontrando significados y darle una vuelta más desde la interpretación a la obra. Es un gran placer para nosotros y un privilegio poder compartir estas canciones en los distintos lugares, donde la obra esta puesta en un lugar de mucho cuidado. Sentimos la expectativa de que cuidemos y mimemos la obra y así la podamos disfrutar todos. A eso nos entregamos y es lo que estamos haciendo. 

-¿A dónde los ha llevado este show que no esperaban?
-Más que a un lugar geográfico, nos sigue sorprendiendo haber podido compartir escenario con tantos colegas, más de 700 músicos instrumentistas han pasado por las orquestas que armamos en distintos lugares, a veces con orquestas estables, otras que armamos nosotros; eso es lo que más nos gratifica, haber hecho un proyecto donde el centro de todo es la música, entenderla como un lenguaje compartido y poder montar los espectáculos en cada lugar haciendo este proceso de preguntarnos cómo podría sonar esta canción. En cada lugar, por la sensibilidad de los artistas que participan, surgen nuevas maneras de encarar las canciones, esto nos hace crecer, aprendemos y nos mantiene frescos, siempre, de alguna manera, estamos tocando el repertorio por primera vez. 

-Hay una apropiación de la obra de su parte.
-Es inevitable, por el hecho de que nosotros estamos ahí. Esa música, esas letras están pasando a través de nuestra propia sensibilidad, de nuestro camino, de nuestras herramientas como músicos y lo hacemos así, entregándonos con el mayor grado de autenticidad que podemos. Somos nosotros, haciendo lo mejor con esta obra, que obviamente tiene un autor, que estudiamos para respetar, pero en la interpretación en vivo nos ponemos al servicio de esas canciones. Termina funcionando muy bien eso, porque no hay nada fingido ahí, somos nosotros tocando esas canciones y creo que de esa manera nos cierra y nos llena lo que está sucediendo.

-¿Se definen como banda tributo?
-No, en el sentido que no pretendemos reproducir una situación, o imitar, sino que somos intérpretes tocando una música que de antemano anunciamos al público, que es el centro del espectáculo y donde pondremos lo mejor de ese repertorio, que en este caso será el de Gustavo Cerati. No se verá es a alguien disfrazado de algo, ni nada por el estilo. 

-¿Es un homenaje en cada concierto?
-Siento que cada concierto es un gran agradecimiento por el legado de Gustavo Cerati, más que homenaje, yo pensaría que más que eso, es un agradecimiento, es disfrutar de esto que tenemos que es un legado que felizmente compartimos con el público en los distintos lugares, es juntarnos a disfrutar, porque la música de Cerati está en nuestro ADN.

-Habrá quien intenta quitarles valor diciendo "es una banda de covers"…
-En la historia de la música la mayor parte del tiempo la composición y la interpretación estuvo separada. Desde Los Beatles, sí empezó a aparecer una tendencia de que los grupos compusieran su propio material y lo interpretaban, pero en otros géneros por fuera del rock sigue vigente esto de que uno pueda elegir un repertorio e interpretar. Entonces nosotros lo tomamos de esa manera, nos formamos como intérpretes. En mi caso yo disfruto mucho del proceso de interpretación de una obra y lo considero rico por lo que implica intentar comprender lo que otra persona puso en una obra, no lo considero un arte menor por eso. Los cuatro participamos de proyectos donde se compone, pero en este proyecto, disfrutamos con la misma intensidad y el mismo grado de valoración el proceso que implica tomar una obra e interpretarla. Tal vez en la cultura rock esto sea más extraño, pero no en general. Mercedes Sosa es un gran ejemplo de una persona dedicada a la interpretación que ha logrado con cada obra que tocó, ponerle un toque mágico, por eso la seguimos escuchando. En ese proceso hay una búsqueda infinita y que nosotros disfrutamos mucho de hacer y de compartir. 

-¿De qué público guardan mejor recuerdo?
-Nos reciben bien en todos los lugares donde fuimos, estuvimos en todas las provincias argentinas, en Paraguay, Uruguay, Chile y nos sorprende que en cualquier lugar, hay mucho cariño y una sensación cuando terminan los conciertos de mucho agradecimiento del público, que es conmovedora. Nuestro guitarrista siempre recuerda una vez que terminamos de tocar en Chile y alguien gritó "¡Vamos Argentina!", entonces hay una sensación de que, aún estando afuera del país, existe un reconocimiento. Estar representando el bagaje de la música argentina y la importancia de la esa música en Latinoamérica, es una sensación alucinante. 

 

  • Los sanjuaninos en el show

Son 22 músicos locales los que integran la orquesta formada para esta ocasión (de cuerdas y vientos), algunos son instrumentistas de la Sinfónica de la UNSJ y otros músicos independientes. La mayoría ya ha tocado en las giras anteriores de Música para volar y el miércoles cuando llegue Bruno Moreno, el pianista del grupo, comenzarán junto a él los ensayos. Como hace cuatro años, nuevamente ha sido convocado el Coro Vocacional, dirigido por José Domingo Petracchini, con sus 40 integrantes para participar de siete canciones entre las que están Puente, Cactus, Zona de promesas. No tiene la misma conformación que aquella vez, por lo que para muchos será la primera vez en el show. En 2017, fue el Coro Universitario el que se sumó a la propuesta. 

 

EL DATO
Cerati sinfónico-A la carta. Música para volar. Viernes 6 de mayo, 21 hs, Auditorio Juan Victoria. Entradas: $ 2200, 2700, 3000 en mpvolar.com.ar y boletería de la sala.