La próxima generación de consolas de videojuegos sumará una nueva máquina recreativa que competirá contra PlayStation 5, de Sony. Una filtración reveló ayer los planes de Microsoft, quien habría guardado en secreto el desarrollo de una consola económica llamada Xbox Series S.
Según reveló el sitio The Verge, la noticia llegó a través de la caja de un joystick blanco para la futura Xbox Series X. Este renovado diseño del D-pad, gatillos texturizados y el botón para compartir sugiere entre sus características que es compatible con Xbox Series S, la cual fue bautizada con el nombre en código Lockhart.
Un documento interno de Microsoft, que fue filtrado en junio, había revelado sobre los planes de la compañía para las próximas consolas.
El kit para desarrolladores de Xbox Series X, con nombre en código "Dante", permitía a los desarrolladores de videojuegos habilitar este modo Lockhart que tiene justamente el perfil del rendimiento que la compañía quiere lograr con esta segunda consola.
Se espera que la Xbox Series S incluya 7.5GB de memoria RAM utilizable, alrededor de 4 teraflops de rendimiento de GPU y que no tenga lector de discos, es decir, será una versión digital de la Xbox Series X. El objetivo es que funcione bien en monitores de 1080p y 1440p, más que TVs grandes en 4K.
Microsoft aún no dio detalles oficiales sobre la presentación de esta consola, aunque se espera que se produzca en algún momento de agosto o también a principios septiembre. Probablemente jugará una gran parte de los planes de suscripción de los servicios de juegos Xbox All Access y Xbox Game Pass Ultimate (Xbox Live y Xbox Game Pass) por una tarifa mensual.
Por su parte, la consola que despierta en la compañía Microsoft las mayores expectativas para competir con PlayStation 5 es Xbox Series X. Con esta estrategia dual, Xbox buscaría seducir a un espectro de usuarios más amplio.
Esta consola se caracterizará especialmente por la potencia, ya que contará con un procesador AMD Zen2 de ocho núcleos (cuatro veces más potente que la actual Xbox One) y una unidad gráfica con 12 teraflops, superando así en este aspecto a la consola de Sony (11,06) para reproducir videojuegos cada vez más complejos desde el punto de vista gráfico.
La nueva generación de Microsoft cuenta con tecnologías de imagen como tasa de sombreado variable, resolución máxima de 4K y 60 fotogramas por segundo (fps) y soporte para tasas de hasta 120 fps.