La industria de las cales tuvo un retroceso del orden del 6% el año pasado con una producción estimada de 1,2 millones de toneladas. Fue por efecto del Covid-19, que tuvo su impacto en la actividad, aunque en menor medida a lo que se preveía. Es que el primer semestre había cerrado con una baja estimada del 24%, pero en la segunda parte del año hubo una recuperación que permitió mitigar el efecto negativo de la pandemia.
Para Raúl Cabanay, vicepresidente de la Cámara Minera de San Juan y gerente general de Caleras San Juan, hay "buenas perspectivas" para este año y con muchas expectativas por los nuevos proyectos mineros que hay en la provincia y esperando la recuperación de la construcción.
Para el retroceso en la actividad tuvieron que ver dos factores. Primero que la industria estuvo paralizada casi durante 20 días en marzo y después la actividad comenzó a regresar en forma paulatina. La otra razón fue que durante el invierno pasado hubo muchos cortes por las intensas nevadas en la cordillera, que impidieron que los camiones pudieran cruzar hacia Chile por el Paso de Cristo Redentor. Es que el 95% de las exportaciones de cal sanjuanina van al vecino país, todo en camiones, mientras que el resto va a Uruguay y algo de producción a Paraguay.
Otros destinos de la industria son la siderurgia y la potabilización del agua. En el primer caso el principal cliente es Ternium, una empresa productora de aceros planos y largos, con planta en Buenos Aires. Allí van a parar unas 250.000 toneladas de cales industriales al año. El otro gran consumidor es AySA, la empresa encargada de proveer los servicios de agua y cloacas para la Ciudad de Buenos Aires y 26 partidos del conurbano bonaerense. Allí van a parar unas 40.000 toneladas de cales al año.
En la provincia hay 6 empresas que concentran casi el 90% de la producción local y el resto está en manos de pequeños propietarios de hornos criollos, que van camino a desaparecer. Estos últimos destinan su producción fundamentalmente a la construcción.
Los principales departamentos caleros en la provincia son Sarmiento, con la mayor parte de la actividad concentrada en la zona de Los Berros, Albardón y Jáchal.
En cuanto a los destinos de la cal en el país, el 56% es para la construcción, el 14% se exporta, el 13% es para la actividad siderúrgica y el resto tiene otros usos como la minería, la potabilización del agua y la producción de papel.
En el caso de la minería, la expectativa está centrada en los proyectos de cobre como Josemaría, Los Azules, Pachón y Altar, que podrían llegar a aumentar la demanda en un 50%.
Usos
La cal es una de las sustancias químicas más difundidas y versátiles que se producen y emplean en todo el mundo, porque directa o indirectamente interviene en la mayoría de los objetos fabricados por el hombre. De ahí su importancia.
En el mundo
300 Es la cantidad de millones de toneladas de cal por año que se producen en el mundo, según datos de la Cámara Minera.