La Quebrada de Zonda es uno de los sitios turísticos más cercanos a la ciudad Capital de San Juan, que no está siendo aprovechado como corresponde, a pesar de su singular belleza paisajística, y que es paso obligado -hasta tanto se construya el túnel desde Rivadavia a Ullum a través de la Sierra de Marquesado- a una serie de complejos hoteleros y gastronómicos ubicados en el departamento Zonda, y hacia la zona donde están emplazados los diques construidos sobre el río San Juan a lo largo de la Ruta Interlagos.
Lo que hace poco menos de una década era el lugar de preferencia de cientos de familias sanjuaninas que se trasladaban en vehículos particulares y hasta en colectivo, para pasar el día disfrutando de un lugar único, con todos los servicios propios de un sitio turístico, se ha convertido en un ámbito muy precario, desprovisto de elementos esenciales, como parrilleros, mesas y bancos, y baños públicos. Los piletones que en algún momento canalizaban el agua que ahora corre exclusivamente por el "Canal Estero” -cuya naciente está en el paso del Río San Juan a la altura del CerroBlanco- no solo están secos, sino que están embancados por arena y barro lo que otorga un paisaje lamentable y triste. La flora de la quebrada se muestra pobre y maltratada, mientras que los árboles han ido desapareciendo sin que se proceda con una reforestación apropiada. Todo esto fue consignado recientemente por una nota publicada por este diario, en la que se daba cuenta del grado de descuido que hay en el lugar.
A lo largo de la Quebrada de Zonda pueden distinguirse varios sectores; el del Jardín de los Poetas, que está en un proceso de recuperación a pesar de que todavía no cuenta con las plantas necesarias para dar forma al tradicional escudo que puede ser observado desde las alturas. Luego, frente a la zona de acceso al autódromo Eduardo Copello está emplazada la obra del Master Plan Parque Aventura Quebrada de Zonda, que corresponde a un proyecto del ministerio de Turismo y Deporte de la Nación, que implicará la recuperación de ese sector. Y, finalmente, está el sector destinado a que la gente acampe por el día, que es la parte más deteriorada donde el abandono se observa en cada uno de los detalles.
Este parque tiene una superficie de unos 2.300 metros cuadrados y fue concebido como una obra que incluye muchos atractivos enclavados entre las sierra de Marquesado y Chica de Zonda, como la galería de túneles entre las que se encuentran las cavas de Zonda y los caminos sobre las ladera de los cerros, entre otros.
La recuperación de este predio surge como una obra impostergable que tendría que ser asumida tanto por Turismo y Obras Públicas de la provincia, como por el municipio de Rivadavia, todos ellos con el asesoramiento de organismos que entienden en la materia como la Facultad de Arquitectura de la Universidad Nacional de San Juan.
La proximidad de la Quebrada a la ciudad Capital de San Juan es otro motivo para acondicionar este parque que en los últimos años ha sufrido un deterioro que ahora cuesta revertir por el esfuerzo que hay que hacer y los costos que esto implica.
