Luego del triunfo ante Venezuela en el Maracaná por 2-0 que le permitió acceder a las semifinales de la Copa América, la Selección Argentina volvió a los trabajos en el predio de Fluminense.

Con ejercicios regenerativos para los que jugaron anoche y trabajos con pelota para quienes no estuvieron en cancha o disputaron pocos minutos, el plantel comandado por Lionel Scaloni vive una jornada de tranquilidad y con buen clima a la espera de lo que se viene. 

Y lo que se viene no es menor. Es nada menos que una semifinal de Copa América ante Brasil en Belo Horizonte, con la posibilidad de clasificarse al partido decisivo del certamen a costa del máximo rival de toda la vida.