Las rejas cargadas de afiches y cartulinas advierten que algo está sucediendo dentro del edificio de la Facultad de Ciencias Sociales de la UNSJ. Las puertas apenas entreabiertas lo confirman. Es que ayer, los alumnos decidieron "tomar" el edificio contra el ajuste presupuestario a las universidades nacionales.

 

Sin embargo, adentro hay movimiento. Y mucho. A nadie le prohíben en ingreso, y lo quieren aclarar. "No estamos cerrando la universidad. Si así fuera, estaríamos haciendo algo que atenta contra lo que estamos reclamando, la privatización del conocimiento, la reducción a clases privilegiadas", aseguran.

 

 

Los bancos están esparcidos por todo el predio. Desde lejos se escucha a los profesores dictando clases. Los chicos, atentos, anotan, preguntan, escuchan, aprenden. "Las clases públicas dependen de cada docente, que han tenido muy buena voluntad y predisposición para cuidar la lucha. De hecho, ambos gremios docentes participan de las asambleas. Hay un promedio de 10 clases en la mañana y en la tarde, en las diferentes facultades. Cualquier persona que esté interesada en venir puede hacerlo porque la idea es colectivizar el conocimiento, que no quede recluido a ciertas camarillas. Algunas clases se desarrollan con contenido especificado en los programas y otras con contenido desarrollado con lo que está sucediendo en el país", aseguró Agustín Molina (20), estudiante de sociología y militante de Nueva Izquierda Universidad, a DIARIO DE CUYO 

 

 

La toma del CUIM comenzó ayer muy temprano. Unos 30 alumnos pasaron la noche allí. Durmieron en algunas de las aulas cedidas por las autoridades, con frazadas y bolsa camas. Para almorzar y cenar, utilizan las ollas gigantes del comedor universitario de El Palomar. "Comemos con las donaciones que pudimos recolectar de familiares, amigos, docentes, personal no docente y la comunidad sanjuanina que apoya la medida", dijo. "A dormir no nos quedamos todes (sic). Muchos, por cuestiones de la vida, fueron a trabajar y volvieron. Quizás otros se van porque seguimos con entregas más allá de los paros, se sigue con los programas de estudio, y tenemos prácticos, entregas, parciales", continuó. 

 

 

 

Con respecto a la continuidad en la modalidad de protesta, se decide en asamblea y por voto de la mayoría. De hecho, chicos disconformes con la protesta, presentaron mociones para modificar algunas cosas y así lo hicieron. "Queremos aclarar que no estamos cerrando los cursos. Hay cátedras que no pueden dictarse al aire libre, como computación, y si el profesor desea hacerlo, tiene toda la libertad para utilizar la sala de máquinas", aclaró.  

 

 

Los docentes de la Universidad Nacional de San Juan transitan su cuarta semana al hilo de protestas contra el "desfinanciamiento de la institución" por parte del Gobierno nacional.