Señor director:

Las plazas y demás paseos públicos son espacios para disfrutar unos momentos, descansar, reflexionar, leer un libro o bien hacer caminatas y ejercicios físicos. Todo en armonía con la naturaleza. Sin embargo, al momento de fijar el mobiliario en las plazas, vale estudiar un poco sobre los lugares donde son colocados. Sobre todo para evitar malos momentos. Desde hace años, salgo de caminata y paso por la plaza de Desamparados. Allí hay varios bancos como el que muestra la foto, en que es imposible sentarse. Este es tan sólo un ejemplo de lo que sucede en otros paseos públicos de la provincia. Ante esta situación, bueno sería que los distintos municipios coloquen los bancos donde puedan ser usados por los ciudadanos y no como en este caso, donde creo que jamás fue usado por los transeúntes.

Hilda Pastorino
DNI 7.901.275