Debido al parate por la cuarentena a raíz de la pandemia del coronavirus, el secretario Adjunto de la Unión Obreros de la Construcción (UOCRA) San Juan, Alberto Tovares, denunció que se ha parado la obra pública en la provincia y que las empresas constructoras locales ya comenzaron a enviar telegramas de despidos a los obreros. Si bien dijo no contar con el número exacto de cuántos trabajadores se han quedado sin trabajo, advirtió que alcanzará a unos 7.500 trabajadores. ""Sé que esta semana la Cámara de Construcción con el Gobierno están analizando salvar algunas obras, en el Comité de Crisis. Ojalá sea así, y que algunos compañeros puedan seguir, pero hasta ahora la realidad es otra. La mayoría de empresas están enviando telegramas y algunas aducen que no tienen insumos", señaló. Desde el Gobierno salieron al cruce de las afirmaciones. El Ministro de Obras Públicas, Julio Ortiz Andino, dijo que se terminará de analizar el tema esta semana, y que "entre jueves y viernes vamos a saber", pero aseguró que no se parará la totalidad de la obra pública como señala el gremio. ""Hay obras estratégicas como los hospitales, algunos vinculados a Educación, y en algunos lugares donde se puede trabajar sin arriesgar mucho respecto al contagio y se va a continuar. Pero todavía no tenemos nada totalmente definido", aseguró. El 23 de marzo pasado se conoció que Uñac decidió frenar todas las obras públicas que no estén vinculadas a la salud pública o la asistencia de quienes menos tienen, y usar los fondos que generará esa acción para reforzar esas áreas sensibles. A su vez, los obreros de las obras paradas serían reasignados a las que siguen en marcha.
Ortiz Andino reiteró ayer que las obras que se frenan son la construcción de la Ruta 40 norte, el Velódromo, el estadio UPCN y el Museo de Ciencias, y que esa inversión se derivará a obras esenciales como los hospitales, para terminar algunos de ellos en estos días, adelantar parte de otros o en algunos casos mejorar el ritmo. También parte de los fondos va a paliar el gasto del armado de hospitales de campaña. Respecto a la falta de insumos de las constructoras, dijo que el gobierno está haciendo gestiones para solucionarlo y que aunque la fábrica de cemento no está trabajando, tiene stock para proveerlos.
Sin embargo Tovares expresó que la preocupación del sector se desencadenó por la oleada de despidos que se inició la semana pasada y mencionó que los telegramas llegaron desde empresas constructoras que están haciendo obras públicas tales como Nacusi, Sigma, Terussi, Perfil y Borrego, ""la mayor parte de firmas que están dentro de la Cámara Argentina de la Construcción". Desde esta entidad se llamaron a silencio y no respondieron la consulta de este diario. ""La mayoría de gente de la cámara ya envió telegramas de despido la semana pasada. Querían suspender y les dijimos que no, porque un trabajador no puede estar 40 días suspendido. El despido al menos permite al trabajador acceder al Fondo de Desempleo para pasar estos días que se pararía la obra pública", señaló el referente local de la UOCRA. El Fondo de desempleo es un monto que da una protección momentánea, por al menos dos meses, y se integra con el 12% del sueldo en blanco mensual de cada trabajador. El monto depende de la cantidad de tiempo que haya trabajado y se cobra en un lapso de 48 a 72 horas. Al respecto Tovares dijo que el gremio también está gestionando con los bancos el pago de esa ayuda que tradicionalmente se cobra por ventanilla en forma presencial y ahora con la cuarentena no se puede.