Conectando. Al presentar el plan, Peña dijo que a través del PPP se podrá "conectar realmente todos los rincones de nuestro país".

 

El Gobierno nacional tiene 59 proyectos de obras en cartera, por un total de 26 mil millones de dólares, que se pondrán en marcha en los próximos tres años y medio, en el marco la primera etapa del Plan Público Privado (PPP) de Infraestructura, anunció ayer el ministro de Finanzas, Luis Caputo.

El funcionario indicó a los asistentes al lanzamiento de esta primera etapa del programa, realizado en el Centro Cultural Kirchner (CCK), en la ciudad de Buenos Aires, que "esto nos va a permitir durante 2018, superar la inversión en infraestructura un 60 por ciento respecto a la de este año, que alcanzó el 2,2 por ciento del Producto Bruto Interno".

Entre los proyectos se encuentran la construcción de 2.800 kilómetros de autopistas y 4.000 kilómetros de rutas en diversas provincias del país como también el mejoramiento de vías de ferrocarriles de carga; la construcción y/o adecuación de complejos penitenciarios en la provincia de Buenos Aires; la construcción y/o adecuación de hospitales en las provincias de Buenos Aires y Neuquén; la construcción de nuevas líneas de transmisión eléctrica de alta tensión; recambio de luminarias de alumbrado público; construcción de soluciones habitacionales a nivel nacional, entre otros.

Con el sistema PPP, es el privado quien se hace cargo de conseguir el financiamiento y construir la obra, y el Estado detecta prioridades y firma con la empresa un contrato por una determinada cantidad de años en el que se compromete a darle un ingreso a la empresa. Para el año próximo se esperan inversiones bajo el sistema PPP por 100 mil millones de pesos , en contratos de energía (eficiencia y transmisión), transporte (corredores, rutas y logística), educación y salud (hospitales y escuelas) e hídricos y vivienda (riego, cloacas, acueductos y viviendas sociales).

En el caso de una planta potabilizadora de agua, el Estado se compromete a comprarle una determinada cantidad de agua procesada a un precio estipulado durante varios años. De esta manera se constituye un típico contrato PPP: el privado aporta el capital, la obra y la operación, y el Estado se compromete a un flujo de dinero a cambio de un servicio y bajo ciertas condiciones.

Esto incentiva a la empresa a terminar la obra lo más rápido posible, para empezar a dar servicios y conseguir ingresos. En todos los casos, una vez terminado el contrato la obra en cuestión pasa al Estado.

El Gobierno licitará hoy la primera etapa del plan de infraestructura vial bajo la modalidad PPP. Así lo anunciaron ayer el ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, y el director nacional de Vialidad, Javier Iguacel, en el acto de lanzamiento del Plan de Participación Público Privado. Entre los proyectos, se mencionó la Ruta Nacional 40, que pasa por San Juan.

"El Plan Público Privado de Inversión implica un contrato a largo plazo entre el sector privado y el Estado, donde éste último no pierde la propiedad del bien, y el sector privado se compromete a la construcción" del mismo, expresó Caputo.

El PPP, permitirá, entre otras cosas, asignación de precios y buena calidad de obra "porque el adjudicatario tiene que encargarse de la construcción y el mantenimiento y, por lo tanto, el incentivo de hacer una obra de buena calidad, generará menos mantenimiento", enfatizó. El jefe de Gabinete, Marcos Peña, que encabezó la presentación del plan, sostuvo ayer que la iniciativa representa "un paso muy importante" y apunta a que "se pueda separar para siempre esa idea que la obra pública tiene que equivaler a corrupción". Agencias