Se abrazaron. Primero las que se encontraron en el camino. Después, todas juntas. Incluyendo a las que estaban en el banco que salieron disparadas buscando a sus compañeras que terminaron jugando. Saltos, cantos, lágrimas. Todas confundidas en ese abrazo triunfal. El "Cantoni" explotaba admirándolas y rindiéndoles homenaje. Era lógico: campeonas del mundo. Las Águilas le dieron la sexta corona mundial al hockey sobre patines argentino femenino. Lo desearon. Lo soñaron. Y al final se les cumplió. Notable actuación para ganarle por un 3-0 concluyente a España, que había sido su verdugo en los dos últimos mundiales.

plantel argentino posa para las fotos antes de empezar la gran final con la bandera en apoyo al lesionado Matías Pascual, del equipo masculino.

El oro deseado se quedó en San Juan. Igual que los chicos del Sub-19. Y no fue casualidad. Más bien causalidad. Porque este grupo fenomenal dirigido por Darío Giuliani trabajó a full siempre y luchó por concretar el objetivo.

Se sabía que los dos últimos partidos iban a ser los más duros. Y Las Águilas los sacaron a flote con autoridad. Con capacidades nobles. Con goles. Con pasta de campeonas. En semis golearon a Portugal 6-1 y ayer le metieron un 3-0 concluyente a España.

Felamini domina la bocha ante la marca rival. Una actuación consagratoria de la juvenil figura sanjuanina. Pieza vital en Las Águilas campeonas.

Justamente la final, pareja en el principio, se destrabó con el madrugador gol de Julieta Fernández apenas pasados los dos minutos. La mendocina, por insistidora, la mandó al fondo del arco. Luchó y luchó con la arquera y una defensora. Tiró por dos veces y la contuvieron pero en la tercera la sopló al gol. Delirio en el estadio. Julieta lo gritó desde el alma. En los minutos que siguieron España pudo empatarlo pero Anabella Flores se agigantó en el arco y tapó todo. Inclusive una bocha tres veces seguidas.

Enfrente, a los 9′, Julieta no perdonó. Otra vez la mendocina, esta vez con un sorpresivo tiro, clavó el segundo. Tranquilidad albiceleste. Nerviosismo total español.

En el complemento Argentina rubricó la ventaja y con gol de Adriana Soto, después de una doble pared con Julieta, dejó el tablero 3-0. Indescontable para el rival. Encima con Anabella siendo una muralla en el arco.

Hasta que llegó ese momento de los abrazos triunfales. Un triunfo épico. Soñado, deseado y concretado. Felicidades, Águilas Doradas… 

Dupla notable. Luciana Agudo besa la copa y la acompaña Julieta Fernández. Las dos rindieron de acuerdo a sus antecedentes. La primera organizando el juego, la otra haciendo goles.

 

La sexta corona de las chicas argentinas

La Selección argentina femenina de hockey sobre patines -Las Águilas- logró anoche el sexto título mundial en su historial. Los éxitos albicelestes comenzaron allá por el año 1998 cuando Las Águilas le ganaron la final a Portugal y se consagraron campeonas mundiales. El equipo era dirigido por Miguel Gómez. Después, en los años 2002 y 2004, repitió la consagración bajo la dirección técnica del profe Mario Calderón. Primero fue en Pacos de Ferreira (Portugal) y después en Wuppertal (Alemania).

Luego llegaría otro doblete de un técnico distinto: El "Negro" Jorge Otiñano. Bajo su dirección técnica Las Águilas ganaron los mundiales que se disputaron en Alcobendas (España) en el 2010 y en Tourcoing (Francia) en el 2014. Ayer fue la sexta consagración, en San Juan.

En el medallero general España domina con 13 preseas (7 de oro, 3 de plata y 3 de bronce), lo escolta Argentina con 12 (6 de oro, 2 de plata y 4 de bronce) y cierra el podio Francia con 3 (1 de oro y 2 de plata).

 

La figura

Julieta Fernández Selección Argentina

Por su entrega, por convicción y, especialmente por sus goles, Julieta Fernández resultó la gran figura en la final ante España. La jugadora mendocina se alimenta del gol y este Mundial para ella resultó un manjar. Completaron el podio de la final la arquera Anabella Flores, de atajadas notables, y Adriana Soto, de un rendimiento siempre parejo.

 

Giuliani, un DT ganador

Darío Giuliani, el técnico de Las Águilas, logró su segundo título mundial dirigiendo un plantel argentino. Antes lo había conseguido con la varones de la Selección argentina mayor ganando el Campeonato en La Roche-sur-Yon, en Francia, en el 2015. En ambos casos Giuliani le ganó la final a España.