El otoño resulta la estación del año ideal para pintar las paredes de la casa o departamento. Los días agobiantes ya son cosa del pasado y nada mejor que aprovechar el tiempo libre o parte del fin de semana en la puesta a punto de las paredes de la casa o departamento donde se vive. Sin duda la pintura es la opción más cómoda y económica para dejar la casa como nueva. Hoy existen en el mercado una amplia variedad de marcas y tipo de pinturas, incluso hay pinturerías que tienen su línea y marca propia, con precios hasta un 30% más económico que las marcas líderes. Y outlets donde se venden latas con pequeños defectos lo mismo que los packaging de presentación, y que permiten ahorrar una gran cantidad de billetes sin descuidar la calidad de la pintura. Y si se anima a pintar por su cuenta el ahorro será más que interesante. 

 Color, color 

La pintura es un material económico -mucho más que el empapelado-, sencillo de aplicar y ofrece grandes posibilidades decorativas. Sabido es que con pintura se puede renovar el aspecto y la decoración de uno o varios ambientes sin hacer grandes reformas y sin gastar mucho dinero. Se puede utilizar sólo un color de pintura para las paredes de una habitación o, para los más valientes, combinar varios colores en distintas paredes. También existen diferentes técnicas de efectos decorativos como pátina, esponjeado, trapeado, etc. Hay pinturerías que ofrecen cursos sin costo para quienes deseen aprender a pintar y realizar estas técnicas.

Lo primero que hay que tener en cuenta si se quiere pintar de un solo color es que la pintura elegida sea la correcta para el ambiente al que se va a aplicar. Algunos de los puntos a tener en cuenta antes de elegirlo, más allá si está de moda, es el tamaño del ambiente y su luminosidad. También hay que tener en cuenta que algunos colores pueden verse en la pared más brillantes que en los catálogos; y contrariamente, otros pueden parecer más oscuros. Para ello se debe realizar una pequeña prueba en la pared, antes de comprar la cantidad final de pintura. Se pinta una superficie de 1 m2 y se la ve en distintos momentos del día. Si hay paredes donde la luz impacta de diferente manera, entonces es importante hacer una muestra de pintura en cada pared. Si en una misma habitación se van a combinar colores, es importante ponerlos juntos en la prueba para ver cómo afectan entre sí. Algunos colores hacen que los compañeros parezcan más fuertes o más pálidos de lo que son en realidad. No empiece a pintar hasta no estar seguro del color. Los colores claros, preferentemente el blanco, aportan claridad en habitaciones pequeñas o con poca luz. Para agrandar visualmente estos ambientes la mejor opción son los colores claros. También hay que tener en cuenta que la gama de amarillos y los ocres generan luminosidad, que los colores fríos, verdes y azules, tienen efecto tranquilizante -por eso son los ideales para dormitorios-. Los rojos y naranjas pueden utilizarse en ambientes grandes o en una sola pared. Tenga en cuenta también que si se pintan ambientes contiguos con colores diferentes, éstos deben guardar una relación de armonía.

¿Al agua o al aceite? ¿Con rodillo o con pincel?

Finalmente, otro punto importante a tener en cuenta es que los tipos de pintura que se vayan a utilizan se dividen entre los que son al agua (látex) y los que son al aceite (esmaltes). Por su parte, estas pinturas se pueden dividir según el tipo de acabado: Satinado (con poco brillo o brillo intermedio) y Mate (sin brillo) -las brillantes no suelen utilizarse para pintar paredes-. 

También se deberá decidir si se va a pintar con rodillos o con pinceles. Lo más sencillo, sobre todo si lo va a realizar por su cuenta es utilizar rodillos los cuales son ideales para pintar áreas grandes como paredes o techos. El tamaño de los mismos se eligen según el área a pintar. Y el tipo de rodillo depende del tipo de pintura que se vaya a utilizar. 

Fuente: Sui Color, más que una pinturería (www.propimat.com .ar)

Para que quede lindo el dormitorio de los chicos

El cuarto de los más chiquitos es, sin lugar a dudas, uno de los espacios más aventureros de la casa. Es el ámbito donde ellos pasan explorando, riendo, creando y jugando en sus primeros años de vida. Donde su creatividad se expresa al máximo y las reglas para la imaginación no existen. Es posible  aportar mucha estimulación usando un lenguaje de signos que apela al sentido del humor y a la ironía de los niños mediante el uso de colores vivos, evitando caer en lugares comunes de lo rosa o lo celeste. Conocer al niño o niña y detectar cuál es su actividad, animal o juego favorito puede ayudar a reconocer un elemento y que éste se repita en varios lugares, ya sea paredes, puertas, ventanas, mobiliarios, pisos desde la forma, el color o el objeto en sí mismo. Ese elemento puede ser, una raqueta de tenis, una mariposa con varios colores, una pelota de fútbol con los colores del cuadro de fútbol del niño o una muñeca por poner algunos ejemplos. Por otro lado, las paredes y puertas de placares pueden transformarse en grandes pizarrones que de forma lúdica permitan a los niños dibujar distintos escenarios para sus juegos. 

Los colores primarios y brillantes como el rojo y el azul siempre son los más utilizados ya que los estimulan a la acción. El verde, en cambio puede estar aplicado más cerca del área de descanso ya que ayuda a la conciliación del sueño. El amarillo aporta alegría, es un color optimista y activa la mente, al igual que el naranja. Y para los más clásicos, los colores rosa y celeste también son de gran aporte en el cuarto de los chicos.

Todos estos colores se pueden combinar perfectamente con colores neutros como los grises y los blancos. Entonces es aconsejable optar por una paleta de dos o tres colores y aplicarlos en paredes y techos junto con los citados neutros. Se puede optar por formas geométricas o por la superposición de los colores, imitando paredes a lunares, para incorporarlos en la decoración o es posible realizar una habitación temática, como un cuartel de bomberos, con un caño para que se lancen, lo que les resultará sumamente divertido. Dependiendo siempre del gusto de los chicos, también se puede recrear un bosque encantado.

 

Colaboración: Lorena Grosjman de Logros Comunicación